TW
0

En 2005 tuve el placer inmenso de poder publicar en la editorial Calambur el libro Barlovento, una antología de poemas de Biel Florit, ‘Sabateret’ (1944-2024), traducida al castellano, en la que estuvimos trabajando intensamente varios meses. Nos conocíamos de antes, de habernos leído, de habernos encontrado en la redacción del Diari de Balears y trabajar con él su poesía fue una lección de humanidad por una parte, de historia de Mallorca por la otra y de catalán. Florit, murió el martes, y había elevado cada particularidad del habla de Sineu a categoría literaria y había dignificado y resignificado los paisajes de su pueblo para universalizarlos a través de la poesía, de sus prosas y de sus artículos. Era un preciosista del lenguaje, pero siempre y en todo caso al servicio de la historia que pretendía explicar. Fue extremadamente generoso conmigo, un auténtico maestro. Descanse en paz.