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Qué lejos quedan aquellos anhelos de nuestra generación de la postguerra civil y del inicio del crecimiento económico, buscando la alegría y felicidad, esos bienes a veces tan difíciles de conseguir, basado en el trabajo y el conocimiento, la capacidad de sacrificio y la constancia en el esfuerzo, tan diferentes de la generación actual, que se basa en el conocimiento y el enriquecimiento de muchos y la creación de muchos puestos de trabajo, aunque a muchos no les llega casi a fin de mes, eso sí, sin privarse de sus cenas, sus cervecitas y sus discotecas, buscando esa felicidad a corto plazo, buscando la fácil inmediatez.

Ahora Mallorca y las Baleares se han convertido en una fábrica de hacer dinero, pero nos alejamos de la cabeza de Europa, cada año más.

En Mallorca, se vive bien en general, aunque el puñetero móvil y la era digital haya incrementado mucho nuestra productividad y ocio, pero también los problemas que conlleva para las generaciones más jóvenes, por su mal uso y dependencia.

No hay trabajador incluso manual, que no tenga un teléfono móvil usándolo incluso en sus horas de trabajo para otros fines.

Quien lo iba a decir, cuando en el año 1968 llegó la electricidad a Formentera y ahora todo crece a una velocidad exponencial, estando en este momento en las IA, etc. conectándonos a la península con cables eléctricos, que permiten a nuestras Islas el crecimiento sin fin.

Mallorca se ha convertido en una fábrica de hacer dinero, lo triste es que se está convirtiendo solo en esa fábrica, que lo abrillanta todo (más o menos) y nos hace olvidar poco a poco nuestra raíces, las que hicieron posible hacer crecer, este árbol, incluso ese bosque.

¿Por qué los que tienen el poder económico y social, no invierten parte de su tiempo, bastaría el 5%, a luchar por y para Mallorca, encontrando entre todos el necesario desarrollo equilibrado o sostenible no solo en sus empresas, sino para toda Mallorca, luchando para obtener más autonomía, más capacidad de decisión, más poder de gasto económico, quizás controlando que ‘Madrid’, no esté solo compuesta por los castellanos, por los grupos de poder y los fondos de inversión, antes la España centralista, antes Castilla, que a partir de Carlos I y Felipe II, se dedicó el oro de la Indias a la guerra contra los «herejes europeos» y «musulmanes», en lugar de crear con ese oro un tejido industrial en la Castilla original y luego España, tan solo Euskadi y Cataluña, se salvó de la quema.

Cuando España perdió las ultimas colonias en el 1898, se visualizó la hecatombe, pero la España de esos reyes hizo crecer, Flandes, el Milanesado, etc.

Es evidente, que los políticos y los que tenían el poder entonces, no ha cambiado con los años, tan solo un poco por la España de las Autonomías (1978) y la entrada en Europa.

No se trata de hacer España más segmentada, sino más realista dando fuerza a toda la materia gris, que también está en las Autonomías sobre todo en la periferia del Estado, desarrollando nuestra Constitución, que es autonómica, un buen «pegamento» para sentirnos más unidos entre todos y no sometidos a ese poderío centralista, económico y social.

Para poder ir revertiendo y mejorando la situación actual, hay que empezar a crear espacios de diálogo y comprensión y unidad en esta Autonomía que es Baleares.

Europa y la actual situación en España nos dan una oportunidad para nuestro avance económico en Europa, no desaprovechemos esta ocasión.

Los isleños podemos tener cierta riqueza, pero nuestro Govern es pobre y no olvidemos que si el Govern es pobre, con el tiempo lo serán los ciudadanos, como ya se empieza a visualizar con el PIB en Baleares y en el poder económico de las clases medias y bajas.

¿Por qué los que tienen el poder en Mallorca, les dan la espalda, al poder político solo de aquí (Baleares), por qué no participan y lo impulsan o, como dice Antoni Riera, no piensan en grande?

Son preguntas, que necesitan respuestas y la acción de estos grupos de poder, así como de los grandes profesionales y de nuestro pueblo, no debemos dejarnos llevar por la inercia de nuestra historia reciente y llegar a estas megaciudades en que se están convirtiendo nuestras Islas, dependiendo aún tanto de estos partidos de «Madrid» y de sus sucursales isleñas.

De momento la Sra. Prohens, debe ser más valiente y conseguir más poder económico y legislativo. Si no habrá que buscar otras soluciones en nuestra casa.

Endavant i fora por!