La Guardia Civil desplegará este año un total de 44.581 efectivos
en todo el país para garantizar la seguridad de los ciudadanos en
la llamada «operación verano», que se inicia el próximo domingo y
que se prolongará hasta el día 15 de septiembre. Este refuerzo en
la seguridad también se desplegará en las Islas Balears, que
contarán este verano con el apoyo de otros 163 agentes.
Según el comunicado de la Guardia Civil, esta operación pretende
reforzar la seguridad de las zonas con mayor afluencia turística,
entre las que se incluye el archipiélago balear. El coronel jefe de
la Sección de Planes y Organización del Instituto Armado, Francisco
Morales, ofreció ayer una conferencia de prensa y recomendó a la
población que actúe con normalidad durante sus vacaciones y que
colabore con las fuerzas de seguridad.
Esta «operación verano» se distribuye en varios dispositivos de
seguridad. Por una parte, se pretende aumentar la seguridad de las
zonas turísticas, pero también habrá un refuerzo en el control de
la circulación y del tráfico de sustancias estupefacientes a
pequeña escala. Precisamente la Guardia Civil es consciente de que
durante el verano aparecen grupos de traficantes, que se aprovechan
de las grandes concentraciones juveniles en locales de
esparcimiento, para fomentar el tráfico de drogas. Este verano
también se ampliará la plantilla de agentes de la Guardia Civil de
Tráfico.
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