Diecinueve enfermos mentales, en su mayoría ancianos, fallecieron
ayer al declararse un incendio, probablemente causado por un
cortocircuito, en un centro psiquiátrico de la localidad de San
Gregorio Magno, a 360 kilómetros al sur de Roma.
De los 19 fallecidos, cuyos cadáveres quedaron carbonizados por
las llamas, once son hombres y ocho mujeres. Otros nueve ancianos
lograron salvar sus vidas al ser rescatados por tres enfermeras del
centro psiquiátrico, que en el momento de desatarse el incendio (a
primeras horas de la madrugada) estaban de servicio.
Los supervivientes fueron trasladados a un centro sanitario de
la localidad vecina de Oliveto Citra, donde no se teme por sus
vidas, ya que sólo presentan síntomas de intoxicación por humo. Los
ancianos, con problemas mentales, sí muestran miedo, ya que
sufrieron un fuerte shock, por lo que están bajo control
médico.
Las causas del incendio se desconocen, pero todo apunta a un
cortocircuito originado por una sobrecarga de electricidad, que
pudo quemar varios enchufes a los que estaban conectados
calefactores. Y es que en esa zona hace mucho frío, en las últimas
horas nevaba abundantemente y en todas las habitaciones estaban
encendidos calentadores eléctricos, según fuentes de protección
civil. El centro estaba compuesto por cinco pabellones construidos
en metal y un material de resina muy inflamable, lo que explicaría,
según las mismas fuentes, la rápida difusión de las llamas. El
fuego quemó totalmente tres pabellones.
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