TW
0
E.PRESS-BARCELONA Unos 750 taxistas, según la Guardia Urbana, y unos 3.000 según los organizadores, se concentraron ayer en el centro de Barcelona para protestar por la muerte de un compañero y para reclamar más medidas de seguridad a la Administración. El cadáver de Luis Pérez Juárez se encontró ayer en Sabadell con heridas de arma blanca.

Los taxistas estacionaron los vehículos alrededor de la Plaza Catalunya y cortaron la circulación, durante más de una hora, de los accesos principales a la plaza. Miembros del sindicato repartieron crespones negros a todos los concentrados, que colocaron en las antenas de los vehículos en señal de duelo. En varias ocasiones, los taxistas hicieron sonar el cláxon.

Todos los taxistas concentrados ayer en Barcelona coincidieron en señalar que «la Administración sólo nos tiene en cuenta cuando nos tienen que multar, pero no cuando tenemos algún problema». El sindicato anunció que realizarán una parada de unas 4 horas el día del entierro del taxista. El taxista fallecido, Luis Pérez Juárez, de 48 años, trabajaba en el turno de noche y «estaba acostumbrado a que le pasaran cosas», según recordaban sus compañeros.