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Entre la tristeza de haber perdido a un ser querido y la alegría de comprobar que Veronika Kovaloska tenía muchos amigos en Cala d'Or. El padre y dos de los hermanos de la joven asesinada en Cala d'Or por su compañero sentimental, llegaron el jueves a Mallorca para recoger las cenizas de Veronika y se llevaron una grata sorpresa al comprobar lo que era querida por la gran cantidad de amigos que tenía la joven eslovaka en Mallorca. La madre de la joven también viajaba a la Isla pero tuvo que tomar un avión de regreso a Eslovaquia cuando la familia hizo escala en Viena debido a su estado emocional.

En una cena celebrada ayer noche unos 30 amigos de Veronika ofrecieron todo su apoyo humano y entregaron al padre y los hermanos de la joven los 3.180 euros recaudados en dos fiestas en los bares de Cala d'Or (Capitan Morgan y Tequila Lounge) y también mediante diversos donativos de particulares.

El alcalde de Santanyí, Miquel Vidal y la regidora de Benestar Social, Maria Pons, recibieron a Vladislav, Lukas y Valadislav Kovaloska en el Ajuntament de Santanyí que ha puesto un apartamento a su disposición durante el tiempo que permanezcan en la Isla. El padre de Veronika, visiblemente emocionado pidió al alcalde que «el asesino no pueda salir de la Isla sin pagar por lo que ha hecho» y también solicitó si podía colocar alguna señal en el lugar donde fue asesinada su hija para tener un lugar donde recordar tan trágicos hechos. El alcalde se comprometió a colocar algún recordatorio en el cementerio municipal ya que los apartamentos son de propiedad privada.

Las amigas de Veronika la recuerdan como una mujer fuerte, firme y alegre por lo que desde el primer momento descartaron la posibilidad de que se tratara de un suicidio, tal y como intentó hacer creer su compañero, Pedro Antonio C.Q.

Los hechos ocurrieron a las seis y media de la mañana del pasado domingo 16. El cuerpo de Veronika apareció en el patio del bloque de apartamentos justo debajo del balcón donde residía. Pedro Antonio afirmó que la joven se había suicidado. Sin embargo la autopsia concluyó que no presentaba las fracturas que debería haberle causado la caída y que murió por un fuerte golpe en la cabeza. La juez del Juzgado de Instrucción número 4 de Manacor ordenó el ingreso en prisión de Pedro Antonio C.Q. tras tomarle declaración.