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JAVIER JIMÉNEZ La Guardia Civil montó ayer un gran operativo de búsqueda para localizar a un detenido que se fugó tras agredir a un agente en Palma. Se trata de un joven obrero que había sido arrestado por robar cinco casas de Santa Maria donde había estado realizando reformas.

La investigación policial para esclarecer los robos, según informó ayer la Oficina Periférica de Comunicación (OPC) de la Comandancia palmesana, se inició en el mes de marzo, cuando un vecino de Santa Maria interpuso una denuncia por un robo en su casa. En las semanas siguientes otros cinco afectados se presentaron en el cuartel por idéntico motivo y los agentes repararon en un detalle muy sospechoso: en todas las viviendas asaltadas trabajaba o había trabajado un obrero que realizaba reformas.

La investigación, entonces, se centró en Josep M.M.S., de 20 años, y se averiguó que algunos efectos sustraídos en esos pisos habían sido vendidos luego en una tienda de compra venta de segunda mano. Allí aparecieron un televisor de plasma LCD de 32 pulgadas, dos ordenadores portátiles, dos videoconsolas, dos cámaras fotográficas digitales, una vídeo cámara digital, dos DVDs, un amplificador y una veintena de joyas. El valor del género no ha sido especificado, pero es muy elevado.

Ese mismo material ha sido devuelto a sus legítimos propietarios. En el comunicado de prensa de la Guardia Civil se especifica que el sospechoso conocía los hábitos de los moradores de las viviendas que luego asaltaba, así como los medidas de seguridad que había en las casas, lo que facilitaba sobremanera los robos.

En la misma operación ha sido arrestada la compañera sentimental de Josep, llamada Luisa C.P., también de 20 años. La joven, supuestamente, estaba al corriente de las actividades de su novio.