Javier JiménezPalma de Mallorca22/10/11 0:00
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Una noche salvaje de dos compinches -uno rumano, el otro marroquí- finalizó en la madrugada de ayer con una gran persecución de la Policía Local de Palma en el polígono de Son Castelló. Poco antes, la pareja había robado en un club de alterne y había provocado varios altercados.

Sobre las cuatro de la madrugada el cuartel de San Fernando fue informado de una serie de incidentes en cadena en las inmediaciones de la Avenida 16 de Julio. Una pareja había sustraído una cartera con dinero en un prostíbulo y después habían pagado algunas consumiciones en bares próximos, en donde habían agredido a algunos clientes. La descripción de los individuos implicados no dejaba lugar a dudas: se trataba de la misma pareja.

Búsqueda

Los agentes del 092 se desplegaron por el polígono y persiguieron a los dos sospechosos, que emprendieron la huida en direcciones opuestas, para complicar su localización. El rumano fue interceptado circulando con un ciclomotor en dirección contraria. No tenía carnet, carecía de seguro y el vehículo no estaba a su nombre. Además, se encontraba en situación de busca y captura por un delito de malos tratos.

La persecución se centró entonces en el otro fugitivo, el marroquí. Un testigo lo vio entrar en una zona de chabolas ubicada bajo el puente que une Son Fuster con Son Castelló, por lo que numerosos agentes se desplazaron al poblado.

Disimulando

Sentado en una silla, disimulando, fue localizado el segundo implicado, que sostuvo que no sabía de qué le estaban hablando los agentes. Sin embargo, un detalle lo delató: junto a él, en una chabola, apareció la cartera que habían robado en el local de alterne del polígono. Eso sí, sin dinero. Los dos compañeros de juerga fueron trasladados esposados al cuartel de San Fernando.