La policía tuvo que intervenir para evitar agresiones. | Vasil Vasilev

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Agentes del Cuerpo Nacional de Policía y de la Policía Local de Palma tuvieron que acudir, en la madrugada de ayer, a la sala de fiestas Cultura Club ante los incidentes que se estaban registrando en el exterior.


Al parecer, el personal de seguridad de Casino Royale, organizadores de la fiesta, se percataron de la presencia de agentes de la Patrulla Verde de la Policía Local que velaban para que se cumplieran las normas de seguridad y el aforo fuese el permitido. En ese instante, para evitar ser sancionados, el personal no permitió la entrada al local de más clientes que los autorizados por la Ley.

A partir de ese instante comenzaron los problemas. Según fuentes próximas a la investigación, los organizadores habían vendido más entradas de las permitidas, es decir, que había un exceso de venta de entradas y mucha gente se quedó en la calle, sin poder acceder al local y con la entrada en la mano.
Ante este hecho, el personal de seguridad y organización devolvió el dinero a todas aquellas personas que lo solicitaban, pero otros clientes reclamaron acceder al interior de la sala dado que disponían de entrada en vigor.
En ese instante se vivieron momentos de tensión. Llovieron vasos, hubo empujones y se requirió la presencia del Cuerpo Nacional de Policía para ayudar en el control de la situación.
En la fiesta-concierto participaban los siguientes grupos: Les Castizos, Ed is Dead, Zonter, Lucc y Kate Donovan, entre otros.

Por su parte, muchos clientes cargaron contra la organización en el evento de Facebook de la empresa Casino Royale y las diferentes redes sociales.
«Me parece tercermundista que vendan más entradas de las que podían vender. El aforo está estipulado y si venden más de lo permitido que se los carguen. ¿Qué quieren que pase, lo del Madrid Arena?», concluye uno de los afectados.