Jaime de Juan. | Assumpta Bassa

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«Estoy viviendo una pesadilla. Uno de mis yernos, hasta la fecha mi brazo derecho y persona de confianza con plenos poderes, se ha vuelto en mi contra, me pidió 200.000 euros y que le cediera la herencia en vida. En caso contrario, me denunciaría por infracciones urbanísticas y otros temas, gran parte de ellos falsos». Así comienza el relato del conocido hotelero Jaime de Juan i Pons, propietario de los apartamentos Playa Moreya de s'Illot y el agroturismo Sa Duaia de Artà.

«Yo tengo cuatro hijos de mi primer matrimonio. Hace años me casé en segundas nupcias y tuve otra hija. Mi yerno Toni Riera convenció a mis cuatro hijos del primer matrimonio y les metió ideas raras. Les dijo que toda la herencia sería para mi otra hija y que les dejaría sin nada a ellos. A partir de ese momento, se pusieron todos en mi contra. Toni, junto a mis hijos, me pidieron que les entregara la herencia en vida, pero yo lo tengo muy claro, ¿cómo les voy a dar la herencia si aún no me he muerto? Al ver que no aceptaba, mi yerno me pidió 200.000 euros. Hasta la fecha, Toni era mi mano derecha. Me he enterado que hace unos 15 días se llevó un ordenador con todas las escrituras, notas y más de 40.000 fotografías personales. El domingo, junto con mi abogado, nos presentamos en la Policía Nacional e interpusimos una denuncia contra él por extorsión», añade Jaime de Juan.

Un grupo de trabajadores de Jaime de Juan se concentró, a las 14.30 horas de este lunes, frente a los Apartamentos Playa Moreya de s'Illot, portando una pancarta en la que podía leerse «Tots som Jaime de Juan Pons».

Por su parte, el yerno en cuestión denunció al hotelero por temas de supuestas infracciones urbanísticas cometidas hace años.