Ultima Hora ha hablado con compañeros y funcionarios que trataron a Rüdeger Peter Oynzten, el radiólogo alemán que acabó con la vida de sus dos hijos el 3 de septiembre de 1996 en Sa Coma. «No tenía amigos entre los presos de Palma, tan sólo algunos médicos, pues él realizaba las radiografías a los presos en la enfermería», recuerda un ex compañero. Oynzten, quien falleció recientemente, ingresó primero en la antigua cárcel de Palma, y después pasó a la nueva, para cumplir los 34 años de condena.
«Era un psicópata de libro»
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4 comentarios
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Ex interno. Tu no estabas en la cárcel tu lo que ves son muchas peliculas, soy funcionario de la cárcel y no te voy a dar pistas , y en primer lugar no se denominan módulos , y seguiría , pero paso . Sigue viendo cine y lee un poco depaso
La mayoría de médicos son vocacionales y hacen lo que pueden o lo que saben, para ayudar a los pacientes. Pero al igual que también sucede en otras profesiones con trato al público, todos hemos tenido la desgracia de dar con algún médico sádico, aunque sólo sea de manera psicólógica, , que disfruta dando malas noticias a los pacientes y haciéndoles sufrir innecesariamente, ya que muchas veces, los diagnósticos estaban equivocados o no eran tan graves, en opiniones medicas posteriores.
No entiendo porque sigue ocupando espacio en las noticias este monstruo con apariencia de ser humano, a mi me bastaba con la primera noticia donde se decía que había muerto, lo que se merece es el olvido y que nadie se acuerde de que alguna vez existió. Y por supuesto creo que sobran las anécdotas de como era o como vivió en la carcel, personalmente no me interesa en absoluto conocer nada de esta abominación de persona que fue capaz de hacer lo que hizo.
A mí me daba mucho coraje. Estábamos en el mismo módulo. Por las mañanas cuando habrían las celdas. Nos encontrábamos en la escalera . Y lo normal al decirle BUENOS DÍAS COMO ESTAS. el contestaba . VIVO QUE ES MUCHO. Después de lo que había hecho a sus hijos (uno pensaba que poca vergüenza)