Ana Julia Quezada. | Efe

TW
1

El titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Almería ha decretado que se deduzca testimonio del atestado realizado por la Guardia Civil en relación a la muerte en Burgos de la hija de Ana Julia Quezada dentro de las diligencias incluidas en la causa por el asesinato del niño Gabriel Cruz.

Es una de las diligencias incluidas en el auto de apertura de juicio oral contra Quezada, remitidas a la Audiencia Provincial de Almería para el juicio con jurado popular contra la presunta asesina del pequeño almeriense.

Precisamente, el pasado 27 de febrero los padres de Gabriel Cruz anunciaron que iban a solicitar que se incorporase la deducción de testimonio de actuaciones que se llevaron a cabo en Burgos en relación con la muerte de la hija de Quezada, expareja del progenitor del niño Gabriel Cruz.

Así lo trasladaron en una comparecencia ante los medios en la que Patricia Ramírez, madre del menor, explicó que estaba previsto solicitarlo durante la audiencia previa a la apertura de vista oral en el Juzgado de Instrucción número 5 de Almería, suspendida a petición de la defensa de Quezada.

Afirmó que esta petición se haría «formalmente para que de alguna manera se incorpore» a su caso esa «historia de Burgos», aunque hayan «pasado muchos años», porque están convencidos de que «tiene mucho que ver» con la muerte de su hijo.

«Lo que sí sabemos es que hay un historial en Burgos, que esté prescrito o no, pasó hace muchos años, pero que esté incorporado al nuestro es lo que pedimos. Como padres, a todo lo que nos podamos agarrar de manera legal para que no pueda hacer daño, siempre en base a la legalidad y al buen proceder, lo vamos a hacer», insistió.

Noticias relacionadas

Según consta en unos informes del Instituto Armado incluidos en el sumario de la causa, consultados por Efe, un tío de la procesada declaró que ésta relató «algo distinto» cada vez que contó cómo se produjo el accidente en el que perdió la vida su hija.

El marido de una tía de Ana Julia contactó directamente con la Guardia Civil tras la detención de la mujer para «hablar sobre episodios ocurridos en su vida que le habían llamado la atención».

Manifestó que el 6 o 7 de marzo de 1996 había recibido una llamada de Ana Julia en la que les comunicó que su hija pequeña, que acababa de traer de República Dominicana, se había caído por la ventana de un séptimo piso.

El hombre subrayó que entonces le resultó llamativa la «falta de empatía con lo sucedido» de Ana Julia, añadiendo que poco después ésta pasó tres o cuatro días en su casa de Lerma (Burgos).

«Varias veces contó lo ocurrido con su hija pero cada día contaba algo distinto. En una versión decía que la ventana estaba abierta, en otra decía que estaba cerrada..."; relató este testigo, quien añadió que a él y su mujer les resultó «raro», pero que el juez dijo que «había sido un accidente y así se quedó».

Un exmarido de Quezada, que residía con ella en Burgos cuando murió la niña, aseguró por su parte que ésta solía escapar por la ventana de una chabola en República Dominicana.
El hombre relató cómo esta niña dormía en una habitación junto a la hija que Ana Julia y él habían tenido y que el domingo 3 de marzo de 1996 cuando se levantó por la mañana fue a verlas y se dio cuenta de que no estaba la pequeña, a la que había acogido.

Apostilló que fue el primero en entrar al patio al que se precipitó la niña desde un séptimo piso cuando ya estaba «fría», apuntando que a Ana Julia le dio «un ataque de ansiedad y no sabía qué hacer», así como que les tomaron declaración y no había vuelto «a saber del asunto».