Harry Flynn, sospechoso de un atentado terrorista cometido en Londres en 1979.

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En la plaza los Jardines de Santa Ponça todos conocen a Harry Flynn, propietario del Celts Well Irish Pub, pero pocos saben su verdadera historia. «¿Buscas a Harry ‘El Sucio'?», bromea un hombre que sostiene un palo de billar en un almacén repleto de máquinas recreativas. «Harry tiene muchas cosas que contar, pero no le gusta hablar del tema».

«El tema» es el atentado terrorista en el que falleció el tory Airey Neave, en Londres, el 30 de marzo de 1979. Una bomba explotó bajo el coche en el que viajaba frente al Palacio de Westminster (sede de las dos cámaras del Parlamento británico).

Atentado terrorista en Londres en 1979

El periódico The Sun señala a Flynn, de 65 años, como sospechoso del asesinato atribuido al Ejército Irlandés de Liberación Nacional (INLA). El grupo terrorista, que mató a más de 150 personas, renunció a la lucha armada en 2009.

El pub de Flynn abrió en 1997. El propietario de un souvenir vecino cuenta que hace unos 15 años que le conoce. «Harry siempre está por aquí, vive en los apartamentos de enfrente. Suele abrir el bar por estas fechas». Un hombre de origen chino al que apodan ‘Paco' dice que Harry acostumbra a tomarse el café, casi a diario, en el restaurante Gino Ginelli.

Este jueves desayunó allí. Uno de los camareros le conoce desde hace 12 años, pero no sabía de su pasado. El Celts Well Irish Pub estaba cerrado este jueves. Artículos del Celtic de Glasgow inundan su interior, donde las camisetas de Inglaterra están prohibidas.

Flynn ingresó en el INLA en 1975 cuando se creó como rival del Ejército Republicano Irlandés (IRA). Ese año le acusaron de robar a mano armada 3.500 libras en un banco de Belfast. Estuvo en la cárcel. Años más tarde se refugió en Santa Ponça.