Agentes del Grupo de Blanqueo, en una diligencia de la ‘operación Sancus’. | Alejandro Sepúlveda

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Dos grupos de Whatsapp descubiertos en los móviles de los dos policías nacionales imputados por revelación de secretos en el ‘caso Cursach' han llamado la atención de los agentes que los investigan. Con los nombres ‘Sancus' y ‘Blanqueo rules', en estos dos grupos cruzaron mensajes durante meses los policías ahora investigados y los principales responsables de la macrocausa, entre ellos el fiscal, Miguel Ángel Subirán, y el anterior juez a cargo de las pesquisas, Manuel Penalva.

Los teléfonos fueron incautados a los dos agentes a raíz de su detención policial el pasado mes de diciembre. El antiguo jefe del grupo y uno de los policías más activos en el ‘caso Cursach' fueron imputados por haber difundido supuestamente un informe de la causa. El episodio incluyó la incautación de los móviles de dos periodistas y ha derivado en la citación como querellados del juez Miquel Florit y el fiscal Juan Carrau. Los terminales de los policías fueron remitidos a una unidad especializada en Madrid para su apertura y volcado. Parte del contenido de los teléfonos ha tenido que ser reconstruido.

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La investigación por revelación de secretos fue iniciada por dos inspectores de Palma pero, una vez avanzó, incluyó a la unidad de Asuntos Internos que desplazó a varios de sus agentes desde Madrid. Los dos policías que fueron detenidos se negaron a declarar en ese momento, algo que sí hicieron otros del Grupo de Blanqueo.

Ambos fueron citados la semana pasada para declarar ante el juez de Instrucción, si bien su comparecencia se suspendió a petición de la Fiscalía y tiene que volver a ser señalada. Los resultados de la inspección de los móviles no han sido aún incorporada a la causa.