Los hechos juzgados tuvieron lugar sobre las 21.15 horas del pasado 22 de octubre. El procesado, de nacionalidad ecuatoriana, siguió a la menor, que tenía 15 años e iba acompañada de su madre, desde el parque de Ses Estacions hasta Pere Garau. Las mujeres se detuvieron al sentirse perseguidas y el hombre aprovechó para tocar el pecho a la adolescente por encima de la ropa.
El agresor, según la versión de la Fiscalía, se lamió sus labios de forma lasciva y miró de arriba a abajo a la víctima. La madre pidió ayuda a una patrulla de la Policía Nacional que se encontraba por las inmediaciones y los agentes detuvieron al hombre por un presunto delito de abuso sexual.
La Fiscalía reclamaba en un principio una condena de cuatro años de prisión para el sospechoso, pero la representante del Ministerio Público ha rebajado su petición a un año tras llegar a un acuerdo con el abogado defensor. El tribunal ha tenido en cuenta la circunstancia atenuante de reparación del daño como muy cualificada.
El letrado del hombre ha pedido la suspensión de la pena de cárcel y los jueces no se han opuesto con la condición de que no cometa ningún delito en los próximos tres años. El encausado también ha asumido cinco años de libertad vigilada.