Imagen de la Policía Nacional en un operativo en Corea. | Alejandro Sepúlveda -

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Los dos conductores que fueron sorprendidos introduciendo droga a través del Port de Palma pasaron este martes su primera noche en prisión. Los arrestados, un ciudadano ecuatoriano, de 35 años y un colombiano, de 48 años, fueron sorprendidos cuando trataban de acceder a la Isla con importantes cantidades de droga escondidas en el doble fondo de los vehículos interceptados. A medida que avanza la investigación se van conociendo nuevos datos. Los investigadores han descubierto que el súbdito colombiano había realizado un total de catorce trayectos anteriores cubriendo la ruta entre Valencia y Palma.

Según fuentes próximas al caso a las que ha tenido acceso Última Hora, los ocho kilos de cocaína interceptados a uno de los conductores iba dirigida como destinatario final a clanes gitanos que operan y tienen su base en la barriada de Camp Redó, conocida popularmente como Corea. Agentes del Grupo I de Estupefacientes de la Policía Nacional en colaboración con Vigilancia Aduanera interceptaron nueve kilos de droga en el Port de Palma. Se trata de una importante incautación de cocaína de gran pureza. Todo comenzó cuando los policías llevaban a cabo un punto de verificación de vehículos y pasajeros arribados en un buque procedente de la Península. Durante el mismo, los agentes de la Policía Nacional apoyados por un guía con perro especializado en detección de drogas localizaron un vehículo susceptible de transportar estupefacientes.

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Tras un primer registro del vehículo no se localizó droga alguna, pero ante la insistencia del perro especialista se decidió revisar de forma más concienciada el coche realizando un registro mucho más minucioso. Una vez se llevó a cabo la inspección del turismo, se localizó un doble fondo en el que se encontró un kilo aproximadamente de cocaína, por lo que se procedió a la detención del conductor del turismo. Acto seguido, los compañeros de Vigilancia Aduanera, se encargaron de registrar un segundo turismo.

La sorpresa fue mayúscula cuando en un doble fondo, conocido popularmente como caletas, se encontraron un total de 10 paquetes de cocaína arrojando un peso aproximado de unos ocho kilos. En ese instante, también se le comunicó la detención al segundo conductor por un presunto delito contra la salud pública. El cómputo general de droga incautada es de nueve kilos. Ambos detenidos no tienen relación.