La Policía Local de Palma detuvo este jueves al agresor en s'Arenal.

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La Policía Local de Palma ha detenido a un joven belga de 29 años por dar un puñetazo a un turista holandés que dejó un vaso en el suelo en s’Arenal. El arrestado, que llevaba marihuana, mostró una actitud agresiva y se negó a identificarse ante los agentes.

Los hechos tuvieron lugar sobre las 5.15 horas de este jueves. Una dotación de la Unidad de Seguridad Integral (USEI) de la Policía Local que patrullaba por la calle Cartago fue requerida por un turista de 19 años quien manifestó en inglés que momentos antes un individuo muy violento le había dado un puñetazo en la cara sin motivo. La víctima mostró a los agentes unas lesiones a la altura del ojo izquierdo.

Mientras las explicaba los hechos, señaló al agresor, que iba andando a unos metros de distancia. Inmediatamente, los policías se dirigieron a él y le pidieron que se identificara y que ofreciera su versión de lo ocurrido.

El sospechoso contó en español que se encontraba sentado sobre una pequeña pared fumando un cigarrillo de marihuana cuando vio que el turista holandés dejaba un vaso en el suelo. Le dijo que lo tenía que coger y echarlo a la papelera, pero como que se negó le dio un puñetazo.

Cuando los policías le pidieron que se identificara formalmente, les dio una riñonera diciéndoles que lo buscaran ellos. En el interior de la bolsa, las agentes no encontraron ningún tipo de documentación, pero localizaron una bolsita con marihuana.

El joven seguía sin querer identificarse, ni siquiera de forma verbal, a pesar de los avisos de los policías, que le dijeron que tenía la obligación de hacerlo y que podía estar incurriendo en un delito. En ese momento aumentó su agresividad y mostró una actitud amenazante hacia las agentes que, en varias ocasiones, tuvieron que retroceder para mantener la distancia de seguridad mínima y proteger su integridad.

En vista de que el individuo seguía con la misma actitud, las agentes le detuvieron por un presunto delito de lesiones de menor gravedad y otro de desobediencia grave a las agentes de la autoridad. A continuación lo trasladaron al cuartel de San Fernando, donde insultó las policías y les lanzó un vaso de agua.

Finalmente, facilitó su nombre y a través de la base de datos de la Policía Nacional, fue identificado como ciudadano belga de 29 años y residente en España.