A la celebración, que tuvo lugar en la capilla real de Todos los Santos, ubicada en los terrenos del palacio, asistieron la monarca; su esposo, el príncipe Felipe de Edimburgo, y un reducido número de invitados, según el comunicado difundido por el palacio de Buckingham, la residencia oficial de Isabel II.
La institución precisó que el enlace se llevó a cabo «de acuerdo con todas las pautas gubernamentales relevantes» para evitar la propagación de la COVID-19. La hija del príncipe Andrés y Sarah Ferguson se comprometió con Mapelli Mozzi en Italia en septiembre de 2019, cuando anunció que contraerían matrimonio el 29 de mayo de este año.
La unión, sin embargo, se tuvo que cancelar en marzo debido al brote de coronavirus, y entonces la pareja dijo que estudiaba la posibilidad de realizar una ceremonia privada para «un pequeño grupo de amigos y familiares», como finalmente ha sido.
Beatriz es la novena en la línea de sucesión al trono británico, así como sobrina del príncipe heredero, Carlos; y prima de los hijos de éste, Guillermo, duque de Cambridge, y Enrique, duque de Sussex.
Edoardo es hijo del exesquiador olímpico Alessandro Mapelli Mozzi, que fue amigo del príncipe Andrés, duque de York, en tanto que su padrastro, que falleció en 2011, era Christopher Shale, un político conservador cercano al ex primer ministro David Cameron. El ya esposo de la princesa Beatriz tiene un hijo, Wolfie, fruto de una relación anterior con Dara Huang.
Su boda es el cuarto enlace real en los dos últimos años, después del de los duques de Sussex, Enrique y Meghan, en 2018; Eugenia de York, ese mismo año, y Gabriella Windsor, hija de los príncipes de Kent, en 2019.
El príncipe Andrés ha sido objeto de polémica en las últimas semanas por su presunta implicación en la investigación de los abusos sexuales perpetrados por su amigo, el fallecido financiero Jeffrey Epstein, condenado por pederastia, a raíz de la reciente detención de su también amiga cercana, Ghislaine Maxwell.
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Tan, tan, secreto ha sido todo, que nadie sabe ni quiénes son.