El granito es muy utilizado en las cocinas de todos los hogares | Freepik

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El granito es uno de los materiales más populares y resistentes para encimeras y suelos en la cocina, gracias a su durabilidad y aspecto estético. Sin embargo, mantener estas superficies libres de manchas puede ser un desafío. A continuación, te presentamos una guía detallada para limpiar y mantener los elementos que tenemos en nuestro hogar de este material en condiciones óptimas.

Para la limpieza diaria, es esencial utilizar un paño húmedo o una esponja suave con agua tibia y jabón líquido neutro. Esta práctica simple elimina la suciedad y los restos de alimentos sin dañar el granito. Además, se recomienda realizar una limpieza más profunda de manera regular, utilizando una solución de agua y jabón suave, y evitar a toda costa el uso de limpiadores abrasivos o productos con ácido, como el vinagre, que pueden perjudicar el acabado del granito. Para manchas más difíciles, una pasta de bicarbonato de sodio y agua puede ser efectiva.

Debes aplicar esta mezcla sobre la mancha y dejarla actuar durante unos minutos antes de limpiarla. Otra opción es utilizar una mezcla de arcilla fina en polvo absorbente sin ácido y agua, particularmente útil para manchas de aceite o grasa. Es importante actuar rápidamente ante derrames de sustancias ácidas como el vino, el café o el jugo de limón para prevenir daños permanentes en la superficie. Para mantener el brillo y la integridad del granito, es importante seguir algunas precauciones básicas:

Evita colocar objetos calientes directamente sobre las superficies de granito. No uses la encimera como tabla de cortar. Protégelo con un sellador específico una vez al año para aumentar su resistencia a las manchas. Para la limpieza general de suelos de este material, se puede utilizar una solución de agua tibia con vinagre blanco y peróxido de hidrógeno, aunque se debe tener precaución con suelos no sellados ya que podrían mancharse.

En el caso de las encimeras se recomienda limpiar cualquier derrame inmediatamente y evitar el uso de utensilios afilados o abrasivos directamente sobre la superficie. El granito, aunque robusto y duradero, requiere cuidados específicos para mantener su belleza natural. Seguir una rutina de limpieza suave, prevenir daños con cuidados preventivos, y realizar mantenimiento periódico son claves para disfrutar de tus encimeras y suelos de este material durante años.