El pasado domingo se celebró la festividad del Corpus Christi. Inicialmente tenía lugar en uno de los tres jueves del año que relucían más que el sol, y cuando el tiempo cronológico, el meteorológico y el calendario religioso festivo iban algo más de acuerdo, abría la temporada anual de helados. La costumbre requería tomarse el primero después de contemplar el paso de la obligada procesión que ese día circulaba por Ciutat. Una de nuestras gloses recuerda el acontecimiento con inequívoca seguridad, recordando la promesa que, en época desgraciadamente incierta, hacía un rumboso galán a su novia o esposa: Francina meva, estimada / mira be sa processó/ perque quan ja serà passada / dins Plaça, d'aigo gelada, / mos n'hem de beure un tassó.
'Aigo gelada' del Corpus
Los helados de Can Joan de s'Aigo son herederos directos de las ‘aigos gelades'
También en Xaloc
- Un coche atropella a una multitud en un mercado navideño en Alemania
- El Gobierno prorrogará finalmente todo el año la gratuidad del transporte en Baleares
- Noche trágica en las carreteras de Mallorca: cinco accidentes se saldan con dos fallecidos, dos heridos graves y cuatro leves
- Herida grave una joven tras un brutal accidente en Inca
- «Es una alegría, la verdad, porque no tenemos demasiado dinero para recargar»
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.