El aniñado rostro de Miquel Reynés Ligero se podrá ver de nuevo en
el banquillo del Drac Inca. El club está a punto de concretar el
regreso de su antiguo responsable sanitario e incorporar así a uno
de los recuperadores más prestigosos de la Isla. Reynés, que en los
albores de la temporada pasada decidió abandonar el organigrama del
club, asumirá de nuevo competencias en la entidad de es Raiguer,
aunque todavía no han trascendido los detalles de un acuerdo que
debe suscribirse en los próximos días.
Reynés había manifestado en sus círculos más íntimos la ilusión
que le generaba poder trabajar junto a un entrenador como José Luis
Oliete y también posibilidad de volver al baloncesto profesional.
«Hemos alcanzado un principio de acuerdo, pero todavía deben
concretarse algunas cosas», subrayó a esta redacción el propio
Miquel Reynés. Larry Richardson, el primer y único fichaje
extracomunitario que ha suscrito el Drac Inca, tiene previsto
llegar el próximo martes a Mallorca y empezar a trabajar bajo las
órdenes de Oliete.
Richardson, formando en la Universidad de Indiana, actuó la
temporada pasada en la TNA argentina y está llamado a convertirse
en una de las principales referencias del nuevo proyecto.
Richardson ha sido elegido, entre otras cosas, por su versatilidad
en las posiciones interiores. En Argentina, especialmente durante
su etapa en Atlético Junín, firmó muy buenos números y en principio
no debe tener grandes problemas para adaptarse a la Liga LEB. Xavi
Punyada, otra de las novedades que presenta el Inca 01/02 también
se incorporará al equipo la próxima semana, casi con toda seguridad
el mismo día que Larry Richardson.
La eliminación de la selección española en el Mundial sub 20 que
se disputa en Saitama (Japón) acelerará la llegada de Puyada, un
director de juego formado en las categorías inferiores del FC
Barcelona y que está considerado como una de las grandes promesas
del baloncesto nacional. Con Richardson y Puyada en la Isla, al
Drac Inca sólo le faltarán dos piezas: un pívot y un alero. No
obstante, el club también medita la posibilidad de incorporar a un
solo jugador "Kelby Stuckey" y dejar la línea exterior en manos de
Alberto Alzamora, Juan Miguel Navalón, Ramón Bordas y el propio
Xavi Puyada, que en el Barça también ha actuado de escolta.
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