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Daniel Zamora (Efe) - NUEVA YORK
Aniversario y victoria. Carlos Moyà avanza en el Abierto de Estados Unidos. El tenista mallorquín, que ayer cumplía 26 años de edad, se regaló la victoria sin necesidad de desplegar su mejor tenis y se clasificó para la segunda ronda del torneo tras derrotar en su primer partido al rumano Adrian Voinea por 3-6, 6-4, 6-3 y 7-6 (7-4). Moyà, tras perder claramente el primer set, consiguió recuperarse y adjudicarse con cierta comodidad los dos siguientes parciales, pero en el cuarto y definitivo set, el más disputado del encuentro, necesitó del desempate, en el que no desaprovechó la primera bola de partido para alzarse con la victoria.

En segunda ronda tendrá como rival al norteamericano Jan-Michael Gambil, con quien ya se ha enfrentado en tres ocasiones, y las tres con victoria para el tenista de Palma de Mallorca. Precisamente fue en treintadosavos de final del Abierto de Estados Unidos de 1998 cuando se enfrentaron por primera vez, y Carlos Moyà necesitó de cinco sets para vencer al jugador americano.

«Sería feo haber perdido en mi cumpleaños. Es un regalo que me he hecho a mí mismo, pero por ahora no lo voy a celebrar. Lo haré al final del torneo», indicó el mallorquín. Carlos Moyà dio por bueno el sufrimiento en el encuentro tras ceder el primer set ya que este hecho le sirvió para demostrarse que está bien. «Al principio no me sentí muy cómodo con la rapidez de la bola. Pero este triunfo me demuestra que puedo luchar y ganar cuando iba en desventaja en el marcador», afirmó. Moyà, que este año se ha vuelto a reencontrar con su mejor tenis después de su gran 1998, se ve ahora con la obligación de hacer un gran torneo al llegar a Flushing Meadows con cuatro títulos a su espalda, incluido en el de Cincinnati en el que doblegó en la final al mismísimo Lleyton Hewitt. «No es que me sienta obligado a ganar tras mi triunfo en Cincinnati, pero es cierto que la gente me da opciones para hacer algo bueno aquí. Ese torneo me ha dado confianza y voy a intentar hacerlo bien», explicó.

El segundo día de juego en US Open fue un calco de la jornada inaugural, ya que si en el cuadro masculino consiguieron acceder a la segunda ronda Tommy Robredo, Alberto Martín y el propio Carlos Moyà, en el cuadro femenino a las dos bajas del martes, se suman las de Gala León, Angeles Montolio, Virginia Ruano y Conchita Martinez Granados, ya que solo Cristina Torrens Valero logró ganar su encuentro. Tommy Robredo, favorito número 31, iniciaba su segunda participación en Flushing Meadows enfrentándose al argentino Mariano Zabaleta, y necesitó de cinco sets, (6-2, 6-7 (3-7), 7-5, 4-6 y 7-6 (7-5)), para rubricar su pase a la segunda ronda del torneo neoyorquino. El tenista argentino no le puso las cosas fáciles a Robredo y el encuentro se prolongó durante cinco horas, en las que ambos jugadores se adjudicaron los sets alternativamente. El punto final a un encuentro tan disputado fue el «tie break» del quinto y definitivo set, en el que Robredro no quiso desaprovechar la primera oportunidad que se le presentó para hacerse con la clasificación para la segunda ronda.

Alberto Martin también consiguió vencer en el encuentro de primera ronda que disputó ante el suizo Michel Kratochvil, y en el que tuvo que remontar el primer set que perdió por 7-5. A partir de ese momento «Beto» no dio opción al suizo y se adjudicó los siguientes tres parciales y el encuentro por 5-7, 6-4, 6-3 y 7-6 (8-6). La buena actuación de los chicos no pudo ser refrendada por las representantes españolas en el cuadro femenino, ya que la única que consiguió vencer en su encuentro fue Cristina Torrens Valero, mientras que Conchita Martínez Granados, Gala León, Virginia Ruano y Angeles Montolio quedaron eliminadas. Torrens Valero se convirtió en la primera española que accede a la segunda ronda del torneo de Flushing Meadows tras vencer a la alemana Angelika Roesch en dos sets por 7-6 (7-1) y 6-3.