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La cuenta atrás hacia el mes de agosto de 2008, o lo que es lo mismo, para los Juegos Olímpicos de Pekín, ya ha empezado para dos taekwondistas mallorquines que forman parte de la aristocracia de una modalidad en la que Brigit Yagüe y José Luis Méndez son dos fijos dentro de la selección española. Así quedó patente en el pasado Campeonato de Europa. En Riga, Méndez regresaba a la alta competición tras superar el esguince del ligamento lateral interno de su rodilla que le impidió tomar parte en el Mundial de Madrid.

Se quedó a un paso de las medallas en el peso gallo, pero en los torneos previos certificó que vuelve en las mejores condiciones para mejorar su condición de suplente en Atenas 2004. Lo de Brigit Yagüe es un caso aparte. La palmesana sigue acumulando metales en su cuello y repitió la plata mundialista en la cita continental en el peso mosca, donde tiene todos los números para conservar la plaza que defendió en la última cita olímpica e intentar de nuevo el asalto a los metales del que privó la thailandesa Yaowapa Boorapolchai. Las platas en Mundial y Europeo le hacen ganar enteros en el ránking que debe asignar las ansiadas plazas para Pekín.

«Todo puntúa y no puedes bajar la guardia en ninguna competición» advierten Yagüe y Méndez, cuya temporada toca a su fin, aunque en la agenda restan dos compromisos de peso: la Copa del Rey y el Internacional de Francia, ambos de pesos olímpicos, y donde esperan seguir acumulando puntos para tener un hueco en la selecta selección que participará en la Copa de Europa de Suecia. Pero eso será en 2006, donde en abril espera de nuevo el Europeo, esta vez en Alemania y la Copa del Mundo de Bangkok.