Héctor Cúper intenta jugar un balón ante Borja, ayer, en la ciudad deportiva del Mallorca.Foto: MONSERRAT

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Ahora que llueve menos, el Mallorca se ha obsesionado con la regularidad. Nadie olvida que el efecto reparador de la victoria ante el Celta es limitado y que mañana al equipo le espera una reválida decisiva para seguir trepando en la clasificación que podría anular totalmente todo el optimismo originado tras el gol de Doni. Por eso, tanto el técnico como los jugadores se han apresurado a subrayar la cita ante el Sevilla y recuerdan que una nueva victoria colocaría al conjunto rojillo en una lanzadera hacia la calma. «Lo único importante ahora es encontrar la regularidad», destacaba ayer el propio Héctor Cúper.

El técnico, que compareció en su habitual conferencia de prensa previa a la jornada, exhibió su versión más relajada, pero sigue sin estar plenamente satisfecho del rendimiento de sus hombres y asegura que va a ser necesario un esfuerzo extraordinario para que no se aborte la remontada. «Con el triunfo sobre el Celta se rompe una dinámica de derrotas y también un estado de ánimo, que ha cambiado después del último partido. Con esos tres puntos se refuerza también la parte psicológica y ahora tenemos la posibilidad de seguir sumando todos los puntos que tengamos en juego. Eso sería lo ideal. Necesitamos empezar a sumar para salvar la categoría y espero que esto no se corte aquí», apunta el de Chabas. «El domingo lo tendremos difícil, pero cuando cambia el estado de ánimo lo hace también la confianza del jugador. Ojalá podamos mantener este ritmo mucho tiempo».

Recuperación
El entrenador ya ha apreciado los primeros síntomas de recuperación en su vestuario y espera que ese optimismo se traduzca rapidamente sobre el terreno de juego: «El futbolista lo que siente ahora mismo es que podemos ganar y que podemos ser mejores de lo que estábamos mostrando. Evidentemente, al ser positivo ya hay una predisposición a trabajar de manera diferente y a recibir las cosas de forma distinta». El preparador rojillo cree que en una situación como la actual «todo se reanima, aunque esto no quiere decir que todo lo hecho anteriormente pase inadvertido, sino al contrario. Es lo que necesitamos, al menos para el domingo y para el partido ante el Cádiz. El ánimo es bueno y tenemos que mantener y adelantar lo que podamos en todo lo que tenga que ver con los ajustes en todas las líneas».

A Cúper no le cuesta reconocer que el partido ante el Celta ha reforzado su discurso, aunque matiza que es debido a que los jugadores están más predispuestos que nunca a asimilar nuevos conceptos: «El entrenador necesita ganar más que nadie porque eso también le ayuda a reforzar ciertas cosas. Además, no es lo mismo trabajar en un ambiente de confianza. Las cosas se hacen mejor, hay otra predisposición y eso logicamente ayuda mucho», argumenta.

Lo que no quiere desvelar el argentino son sus planes para el encuentro de mañana, que se terminarán de perfilar en la sesión a puerta cerrada de hoy. «La línea de cambios a veces se da por las bajas, otras porque vuelven jugadores y yo apuesta por darle entrada...». En este sentido, añade que «hemos podido repetir equipo un par de veces, pero lo único importante ahora es encontrar la regularidad. Hay que ir cambiando cosas».

Una de las novedades en la alineación frente a los sevillistas puede ser el regreso de Yordi, al que Cúper podría utilizar para batallar frente a la potente zaga andaluza. El técnico no da pistas, pero todo hace pensar que tiene preparada una nueva batería de cambios y que la línea atacante será la más reformada. «Depende de lo que quiera me quedaré con uno u otro. A lo mejor busco un poco de lucha o fortaleza física y es probable que me decante por Yordi. Si quiero velocidad, igual alineo a otro. Ya veré».

Donde más se extendió el técnico fue en el análisis del rival. El de Chabas no se fía de lo que pueda ofrecer la escuadra de Juande Ramos y se muestra especialmente preocupado por la velocidad de los delanteros andaluces, a los que ha catalogado como una gran amenaza para el Mallorca: «Es un oponente muy complicado, sobre todo fuera de casa. Tiene jugadores muy veloces y muchas variantes que le convierten en un conjunto bastante equilibrado. Cuenta con hombres rápidos como Saviola y eso es en lo que se basan».

Después de comprobar la evolución sevillista en su último cruce ante el Valencia, el preparador de los baleares subraya que «han podido mantener la misma línea positiva del curso pasado y eso no es fácil. Están como renovados y los veo muy enteros. Creo que lo tendremos difícil porque además tienen mucho carácter, juegan sin ningún temor y tecnicamente son muy completos. Es un equipo diferente al Celta porque ellos son un poco más verticales».

El polémico reencuentro entre Arango y Javi Navarro también fue abordado por el entrenador argentino, aunque éste pasó de puntillas y no quiso ahondar demasiado en su visión particular sobre el tema: «Está en el recuerdo y el domingo nos vendrá a la memoria de nuevo, pero tampoco hay que hacer de esto una guerra ni nada parecido. Será un partido normal». Sobre las declaraciones de Arango en las que afirmaba que se iba a proteger para no recibir ningún golpe parecido al que sufrió el ejercicio pasado, Cúper señala que «hay que protegerse, no sólo de algunos jugadores, sino que debe tomar precauciones en choques y otras jugadas. Arango si juega no puede estar pendiente de protegerse porque va a estar muy ido. Debe ir a por todos los balones. Debe ser un partido normal y cada uno debe jugar como pueda». El técnico tiene otra oportunidad y no debería malgastarla.