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El escritor Albert Goulet llegó a Mallorca por primera vez en 1952 de la mano de Robert Graves. Pronto se enamoró de la Isla y compró una casa en Fornalutx, la Posada de Balitx, donde pasa largas temporadas. Junto a su mujer, convirtió aquella casa en un centro de dinamización cultural. Por allí pasaron escritores, pintores, artistas de toda nacionalidad y condición. Pero hace seis años, con el fallecimiento de su esposa, Albert Goulet truncó esta trayectoria. Ahora, tras estos años de silencio, Goulet ha decidido volver a dar vida cultural a su casa de la Posada de Balitx. Y lo hace con dos exposiciones que hoy se inauguran en diversas salas de esta espectacular casa. La pintora Paquita Mayol y el escultor británico Jeoff Moore realizarán en las salas de esta espectacular casa sus dos primeras exposiciones en Mallorca.

La pintora muestra en Fornalutx una veintena de obras en la que representa a animales, de los que quiere mostrar «sus miradas, lo que quieren expresar con sus ojos: la dulzura, la tristeza, la furia...», explica la artista. Se trata de una colección de pasteles sobre papel y entre ellos destacan los felinos, especialmente los gatos. Esta es la primera vez que se puede ver en Mallorca obra de Paquita Mayol, que pinta tan sólo desde hace tres años, una vocación que abandonó para poder cuidar de su familia.