A la notable presencia de galerías mallorquinas en la feria Artexpo
de Barcelona se une la del artista Damià Ramis, que llegará a la
Ciudad Condal con un espacio madrileño, la galería Gaudí, que se ha
interesado por la obra de este escultor con él que ya trabaja en
varios proyectos.
Ramis, a quien la galería prepara una exposición en Madrid,
llevará a Artexpo, -entre el 4 y el 9 de noviembre-, bronces de los
dos últimos años «que reflejan diferentes técnicas y distintas
líneas de trabajo», explicaba este escultor, quien asegura «no
soportar la rutina», lo que le lleva a probar e investigar «tanto
técnicas como temáticas».
Por un lado, los visitantes de Artexpo podrán descubrir su
interés por la anatomía, por «la dinámica de las formas» a través
de figuras humanas «que se mueven como flotando en el aire con
fuerza», dice Ramis. Por otro, expondrá también una serie inédita
sobre animales, más expresionista, modelada directamente en yeso
sobre un esqueleto de hierro. Son figuras de reptiles, insectos o
cabezas de toros en las que parte de su fuerza reside en la propia
técnica empleada, consiguiendo efectos de espontaneidad y juegos de
luces y sombras. Ramis explica sobre estos animales que cobran vida
en su taller que «todos los elementos de la naturaleza tienen su
lado escultórico y yo lo busco, me interesan resultados
nuevos».
Por último, en Barcelona se podrá ver obra sobre papel a base de
técnica mixta y pigmentos, café, tintas, goma laca, «mezclas que,
al final, resultan mágicas», dice.
Como escultor, Ramis asegura que «me interesa observar y no
cerrarme ningún camino, me emocionan desde la Venus de Samotracia
hasta el cadáver de una avispa que se muere en el taller; lo que me
interesa es que la obra me emocione. Hoy en día, en arte, se abusa
más de la sorpresa que de la emoción cuando la sorpresa es algo
efímero y la emoción lo que perdura».
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