Atrincherado en Maó, el menorquín está grabando su nuevo álbum con el apoyo del artífice de su debut, Ricard Ramisa, y del músico y guitarrista Joan Bibiloni. Quienes, además de coproducir, se están encargando de la interpretación instrumental junto a otros músicos isleños como Sergi Martín, Jesús Vázquez, Carlos Sintes, Josep Lluís Pons, Andreu Barber y Carles de la Primavera. El álbum contará también con un tema compuesto por Tomeu Penya.
«Mi primer disco, A ritme d'illa, era muy variado musicalmente. Ahora estamos buscando un sonido más homogéneo y próximo al de Verigut», adelanta el artista. Rumb a Menorca, explica, define, en un juego de palabras, la que será su nueva línea músical: la rumba. Pero, añade, «no queremos que sea la típica rumba catalana ni tampoco andaluza, sino más mediterránea». Del nuevo trabajo, explica, producirán varios videoclips «con historias divertidas», siguiendo la receta de su famoso single.
Tratar de explotar la fórmula puede resultar un arma de doble filo. Lo que ayer fue un boom puede no serlo mañana. Y Mariano sabe que «no será fácil repetir el éxito», pero hablando con él y con Joan Bibiloni, queda claro que están poniendo toda su ilusión y buen hacer para volver a contar con el apoyo de sus seguidores. Si todo va bien, sus nuevos cortes rumberos sonarán, y mucho, en las próximas noches de verano.
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