Pelaires abre las puertas de su jardín con la exposición ‘Clivias', de Rafa Munáriz

Para el desarrollo de la composición, el autor pensó en el «paisajismo», tratando de realizar «una aproximación imaginaria a lo que pudiera ser la representación de una flor a través de escultura, pensando también en cómo el uso del color permite que esta destaque frente al entorno». De esta manera, tal y como explica Munárriz, el conjunto «trata la repetición industrial en relación a la repetición formal de la flor», en este caso una clivia. Así, la similitud de la flor está en la aproximación del color y en su repetición, no obstante, a nivel formal son piezas que parten de decisiones personales, sirviendo de inspiración el mundo urbano y la formalización industrial tratando de darle un giro con ruptura en el proceso industrial para generar formas orgánicas.

Además, los nombres de las figuras surgen de una nomenclatura que remite a la industrialización del color, tratando de acercarse al tono de la clivia partiendo de la carta de color RAL. De este modo, obtiene Clivia Rojo Tráfico, Clivia Rojo Rubí y Clivia Rojo Carmín. A su vez, se han utilizado «chapas metálicas sin más planos que a través de plegados que van generando formas y fingiendo que tienen un volumen mayor», siendo esta manera de producción industrial la estrategia usada para desarrollarlas. Luego, con esta técnica lo que ha hecho ha sido «desfigurarla o romperla para generar curvas y formas orgánicas que son las que han terminado dando una apariencia más semejante a la naturaleza».

Con todo, Munárriz, que ya había expuesto en el interior de la galería, asume con ilusión esta nueva oportunidad. Por su parte, Pelaires, en su compromiso por seguir buscando nuevas propuestas y abrir sus puertas a las generaciones más jóvenes, brinda la ocasión de seguir presentando nuevos proyectos en este cuarto espacio exterior, empezando por el de Rafa Munárriz.