La Alianza Atlántica se enfrentó ayer a su jornada más accidentada
desde el inicio, hace 39 días, de su campaña aérea contra objetivos
estratégicos en la República Federal de Yugoslavia (RFY). Se
perdieron dos aviones por fallo mecánico y se destruyó un puente al
norte de Pristina en el mismo momento en que pasaba un autobús con
civiles abordo, «que no pudo ver el piloto que realizó el ataque».
Tres accidentes, el último con pérdidas humanas, que coinciden con
la liberación por el presidente yugoslavo, Slobodan Milosevic, de
los tres soldados norteamericanos.
El primer accidente de la jornada se produjo a las 13:00 horas
de ayer, cuando un avión aliado lanzó una primera bomba contra el
puente de Luzane, a veinte kilómetros de Pristina, donde se
encontraba un autobús con civiles, que quedó destrozado. «El piloto
no lo vio», afirmó Freytag que reiteró que «nuestra intención no
era provocar víctimas civiles», que no fueron cuantificadas pero
tampoco descartadas. Sobre el mismo puente fue lanzada una segunda
bomba 53 minutos más tarde que destrozó una ambulancia, que tampoco
fue vista por el piloto.
Es el sexto error que se produce desde que el pasado 24 de marzo
la OTAN decidiera iniciar sus ataques sobre la RFY para poner fin a
la barbarie a la que está sometiendo Milosevic al pueblo serbio.
Pero minutos después de conocerse el accidente, el presidente
yugoslavo anunciaba que iba a entregar a los tres soldados
norteamericanos capturados en la frontera con Macedonia cuando
realizaban una patrulla y desafiaba de nuevo a la Comunidad
Internacional. Jamie Shea, portavoz de la ALianza, asegura que en
este conflicto no es Milosevic el que lleva la iniciativa, sino la
OTAN.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.