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PAULA GIL-FRÀNCFORT El euro sufrió ayer otro achaque que lo arrastró hasta el valor más bajo de los últimos seis meses frente al dólar, tras publicarse una nueva caída del índice de confianza empresarial en Alemania, mayor al esperado. El Banco Central Europeo (BCE) fijaba su cambio oficial en los 0'8685 dólares, es decir, un dólar cuesta 191'5 pesetas. La caída en abril de la confianza empresarial alemana y la reciente debilidad del euro han aumentado la presión sobre el Banco Central Europeo (BCE) para que reduzca de nuevo los tipos de interés en la eurozona, aunque posiblemente no lo haga hasta el verano.

El índice de confianza empresarial, medido por el instituto económico Ifo, descendió en abril en Alemania hasta los 92'5 puntos, la cifra más baja desde mayo de 1999, dato que ha contribuido a intensificar la debilidad del euro, que ha caído hasta su nivel más bajo de los últimos seis meses. Esta debilidad podría inducir a la entidad a una intervención a favor del euro, según fuentes financieras, que recordaron que la última operación de esta índole en los mercados se realizó en noviembre pasado, cuando la moneda estaba en 0'8640 dólares. Al margen de consideraciones coyunturales, casi todos los expertos creen que el Consejo de Gobierno del BCE esperará aún para modificar los tipos y reactivar en consecuencia el crecimiento económico y que en su reunión de hoy no tocará el tema y los dejará en el actual 4'50 por ciento.

Michael Schubert, analista del banco alemán Commerzbank, dijo ayer que descarta que la entidad europea abarate mañana de nuevo el precio del dinero, pero pronosticó que durante el verano «se producirá una nueva bajada de, al menos, medio punto». Esta opinión era compartida por Jens Dallmeyer, del Deutsche Bank, que espera una bajada de los tipos de 25 a 50 puntos porcentuales por parte del BCE en julio. El foco de las preocupaciones es ahora Alemania, primera economía de la zona euro, pues se teme que la ralentización de su crecimiento afecte al resto del área. Este país es el destino de un quinto de las exportaciones de los otros once Estados de la zona euro.