TW
0

Mientras se reanudan los vuelos interrumpidos entre Los Angeles y París por la alerta terrorista, las autoridades de EE UU advierten de que siguen preocupadas por la posibilidad de que la red Al Qaida perpetre atentados con aviones.

Sin embargo, el aeropuerto de Los Angeles, uno de los más transitados del mundo y uno de los objetivos al parecer mencionados en las amenazas recibidas por las autoridades de seguridad de EEUU, mantiene los estrictos controles impuestos esta semana.

Los seis vuelos de Air France entre París y Los Angeles suspendidos hace dos días se reanudan hoy con normalidad después de que las autoridades francesas determinaran que no había indicios para sospechar de los pasajeros ni de las tripulaciones.

El Departamento de Seguridad Nacional ha indicado que aún teme que los terroristas de la red Al Qaida tengan intención de secuestrar aviones de pasajeros para repetir atentados como los del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York y Washington y que se cobraron casi 3.000 vidas.

«Seguimos preocupados acerca del deseo de Al Qaida de usar un avión como arma», dijo el portavoz del Departamento, Brian Roehrkasse. Para evitar un suceso de ese tipo, los funcionarios de las agencias de seguridad de EEUU examinan cuidadosamente las listas de pasajeros y tripulantes de cada avión que tiene previsto aterrizar en alguna ciudad del país.

En este sentido, las autoridades estadounidenses creen que la suspensión de los tres vuelos diarios de Air France entre París y Los Angeles este miércoles y jueves pudo evitar un atentado, pese a que el Gobierno francés no ha encontrado motivos de sospecha.