TW
0

AGENCIAS-LONDRES
La secretaria de Estado norteamericana, Condoleeza Rice, señaló ayer que la Constitución iraquí fue probablemente aprobada por los votantes en el referéndum celebrado el sábado en el país.

El presidente de EE UU, George W. Bush, y otros cargos de su Gobierno están complacidos por la alta asistencia de votantes en Irak lo que, afirman, es un enorme paso hacia la democratización iraquí y un revés para los terroristas.

Rice dijo que «millones de votantes» acudieron a las urnas en la consulta popular del sábado y que esto es un hecho «altamente positivo».

Rice declaró que habló con el embajador de Estados Unidos en Irak, Zalmay Khalilzad, y que sus comentarios sobre que la Constitución podría ser aprobada están basados en «los cálculos de la gente sobre el terreno».

Bush, que se halla en la residencia campestre de Camp David, en el vecino estado de Maryland, está alentado «por los cálculos iniciales que muestran una concurrencia en torno al 61 por ciento y los informes de que no hubo mayores actos de violencia», dijo su portavoz, Allen Abney.

Abney repitió declaraciones de Bush en el sentido de que el voto de los iraquíes es un «severo golpe a las ambiciones de los terroristas y envía un claro mensaje al mundo de que el pueblo de Irak decidirá el futuro de su país a través de elecciones pacíficas y no de la insurgencia violenta».

El recuento de votos del referéndum continúa en Irak, mientras los suníes advierten contra los supuestos intentos de amañar los resultados de la consulta.

Los votos de cada urna son contados al menos dos veces, y esa es la razón de que el anuncio de los resultados lleve al menos 48 horas desde el cierre de los colegios, según dijo Abdel Husein Handawi, miembro de la comisión Electoral Suprema.