El cuerpo de McCain ha llegado a la Catedral de Washington después de detenerse en el monumento a los Veteranos de Vietnam, donde su esposa Cindy McCain, ha colocado una ofrenda floral para honrar a los que murieron en la guerra.
McCain pidió a Obama y Bush, un demócrata y un republicano, que leyeran unas palabras en el funeral. Donald Trump no ha asistido, ya que el difunto manifestó antes de morir que no quería que el actual presidente de los Estados Unidos acudiera a su funeral.
Meghan McCain
La hija del fallecido ha rendido homenaje a su padre y ha criticado al presidente Donald Trump, a quien sin nombrar ha acusado de usar una «retórica barata» en contra de un hombre considerado como un héroe de guerra y un estadista.
«Era un gran hombre», ha dicho Meghan McCain respecto a su padre. «Nos reunimos aquí para llorar el fallecimiento de la grandeza estadounidense, de lo real, no la retórica barata de hombres que nunca se acercarán al sacrificio que él ofreció tan voluntariamente».
La familia de McCain había dejado claro que Trump no sería bienvenido en los actos conmemorativos en Arizona y Washington o en el entierro privado del domingo en Annapolis, Maryland, en la Academia Naval de Estados Unidos.
Importantes miembros del Gobierno de Trump, entre ellos su hija Ivanka, su yerno Jared Kushner, el jefe de gabinete John Kelly y el asesor de seguridad nacional John Bolton han estado presentes en la solemne ceremonia del sábado.
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