Fuego en la frontera tras el lanzamiento de cohetes y la respuesta de artillería. | Reuters - ATEF SAFADI

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El Ejército israelí confirmó este sábado haber detectado unos 65 cohetes lanzados desde Líbano a Israel, que o bien fueron interceptados por la defensa aérea Cúpula de Hierro o cayeron en zonas abiertas, a lo que respondió con fuego de artillería al origen de los lanzamientos. «A lo largo del día, se identificaron unos 65 proyectiles que cruzaban desde el Líbano hacia territorio israelí. (...) La artillería de las Fuerzas de Defensa de Israel alcanzó el origen de los lanzamientos y no se reportaron heridos», señaló un comunicado castrense.

El lanzador utilizado para disparar hacia la localidad isrealí de Abirim, atacada este viernes por primera vez, fue alcanzado por un avión de combate israelí, además de una estructura militar de Hizbulá en Ayta ash Shab, agregó el Ejército. El grupo libanés reivindicó hoy de momento siete ataques contra Israel, incluidas dos andanadas de cohetes por primera vez contra las localidades israelíes de Abirim y Neve Ziv.

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Esos ataques son en respuesta a los bombardeos israelíes durante la noche en el sur de Líbano, que mataron a dos combatientes de Hizbulá, Ali Maatuk -comandante de la fuerza de élite Radwan, según Israel- y Mohamed Mustafa; después de que ayer muriera otro miliciano del grupo y un miembro de las Brigadas al Qasam, brazo armado de Hamás, en Líbano. «Además, la Fuerza Aérea israelí atacó almacenes de armas de Hizbulá en la zona de Blida y Hula, en el sur del Líbano, así como infraestructura terrorista adicional del grupo también en Hula», señaló el Ejército; mientras que su artillería disparó desde la frontera las áreas de Chebaa, Kfarkela, Ramyeh, Al Dahira y Yarine.

La frontera entre Israel y Líbano vive su mayor pico de tensión desde 2006 con un intenso intercambio de fuego desde octubre, en paralelo a la guerra en Gaza, que se ha cobrado la vida de unas 540 personas, la mayoría en el lado libanés y en las filas de Hizbulá, que ha confirmado unas 340 bajas -algunas en Siria-, además de un centenar de civiles. En Israel han muerto 30 personas en el norte, 18 militares y 12 civiles.