Jesús Hernández.19/08/02 0:00
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Dónde vamos esta noche? Es la pregunta clave de los miles de jóvenes, y no tan jóvenes, que habitan el ambiente nocturno de Mallorca. La respuesta no es tan sencilla, en el grupo siempre hay discrepancias dependiendo de los gustos de cada persona. Un lugar exótico es Portals, terrazas repletas de colorido y glamour ofrecen un escenario ideal para lucir las mejores galas. Elegido por numerosos famosos para su vida social en la Isla, se caracteriza por su exquisitez. Un ambiente distendido, atuendos de las mejores marcas del mercado y un cierto distanciamiento con las personas «mundanas» conforman la esencia de una zona que no pasa de moda.

El extremo contrario se encuentra en Magaluf, un ambiente nocturno puramente turístico: alcohol, música comercial y desenfreno definen los rasgos principales de esta parte de Mallorca. Una figura peculiar de estas zonas turísticas son los relaciones públicas de las discotecas. Situados estratégicamente, avasallan al turista extranjero, sobre todo chicas, con entradas y copas gratis. Eso sí, como vean que eres español ni se acercan.

En un punto intermedio se sitúa Palmanova, retratistas, pintores, caricaturistas... invaden los paseos, mientras terrazas y pubs se llenan con turistas y mallorquines. Un toque alternativo refresca al visitante, su secreto reside en compaginar adecuadamente tranquilidad y distracción. Tres ejemplos de la noche palmesana, tres mundos diferentes que definen al turista.