«Mallorca es el lugar ideal para realizar un ejercicio de gran
complejidad como éste, con espíritu y capacidad expedicionaria»,
indicó ayer el teniente general Juan Ortuño en la Base General
Asensio, junto al comandante general de Balears, Luis Peláez
Compomanes, donde hoy se activa la fase de ejecución del ejercicio
de la OTAN «Hirex 03», primer despliegue de estas características
que se realiza a nivel nacional con la participación de otros diez
países aliados.
Una espectacular movilización que ayer pudo observarse al
completo desde el aire a bordo de un helicóptero militar y que ha
sumado más de 2.000 militares y 500 vehículos tácticos repartidos
entre esta base, donde se halla el mando operativo y las de Cap
Blanc, con el puesto de mando táctico; Son Sant Joan, donde se
ubica el puesto de mando retrasado y Porto Pi, con el puesto de
mando a retaguardia.
El objetivo de esta gran operación de defensa se fundamenta en
verificar los procedimientos para desplegar todo el cuartel general
y los apoyos que necesita en un supuesto escenario lejano, que
obligue a trasladar personal y material por vía aérea y marítima. A
partir de su establecimiento, en las bases se activa hoy una
simulación por ordenador del desarrollo de la acción, basada en la
liberación de un territorio insular invadido.
En General Asensio opera el puesto de mando principal dividido
en tres sectores de acceso restringido que alojan el cuartel
general, mando regional y operaciones futuras, ubicados en tiendas
con diferentes células operativas y protección atmosférica nuclear,
química y biológica. Un campamento montado en tiempo récord que
alberga el control y coordinación de fuego, una sección de
ingenieros para analizar la movilidad propia y del adversario, un
sofisticado sistema de comunicaciones via satélite y a través de 15
estaciones de radio con antenas colocadas en distintos picos de la
Isla, entre otras instalaciones.
G. Alomar
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