J. L. Ruiz Collado10/12/03 0:00
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El 40 por ciento de la flota de transporte discrecional de las grandes empresas de Mallorca estuvo parada este verano de lunes a viernes por la baja demanda turística existente. Por contra, los fines de semana (sábado y domingo) las empresas se vieron obligadas a subcontratar autobuses para dar salida a la programación prevista, según indicó ayer el presidente de Transunión, Miquel Florit Morro. Esta situación es la principal causa del descenso de los niveles de facturación en el presente ejercicio económico en el sector del transporte discrecional por carretera. Las previsiones para 2004, según la patronal del transporte discrecional, son más positivas, «porque se prevé un incremento del número de visitantes a las Islas».

Esta situación adversa es la que va a poner la patronal encima de la mesa de negociación con los sindicatos en la negociación del convenio colectivo con los conductores. Los sindicatos van a solicitar un incremento anual para 2004 de entre el 7 y el 8 por ciento, mientras que la patronal ofrecerá mejoras sociales y el IPC. La patronal apunta que en los últimos diez años, «hemos incrementado un 33 por ciento por encima del IPC habido los salarios, lo cual da una idea del esfuerzo que han tenido que realizar las empresas. Los sindicatos, pensamos, son conscientes de ellos y esperemos qeu actúen en consecuencia».

Precisamente, en breve se iniciarán las negociaciones entre patronal y touroperadores para contratar la próxima temporada de verano. Al respecto, Florit apuntó que van a pedir a los grupos turísticos un aumento según el IPC que fije el Gobierno. La patronal del transporte discrecional pide a los grupos turísticos extranjeros y nacionales que apoyen al transporte discrecional balear, «porque saben que estamos atravesando una situación difícil y se exigen medidas apropiadas», comenta Miquel Florit. Uno de los aspectos que va a marcar la trayectoria de este sector a partir de agosto del próximo año, «será la implantación obligatoria del tacógrafo digital, que provocará una auténtica revolución en el desarrollo de la actividad laboral, lo cual redundará en una mejora de la calidad y seguridad».