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Paulino García del Moral Atance ha sido el primer mallorquín del año. Llegó a este mundo con las uvas, «un minuto después de la medianoche», cuenta su madre, Rosa, cordobesa y escaparatista de profesión, trabajo que espera aparcar durante unos meses para cuidar al bebé que al nacer pesó 3 kilos 330 gramos y midió 52 cms. Su padre, Gabriel, que trabaja en la Cambra de Comerç -y con quien viajamos hace años a la ex Yugoslavia en tiempos de guerra en un viaje organizado por Joves Empresa- ris-, dice que se llamará Paulino porque así se llama su abuelo. El parto fue rápido y Rosa estuvo acompañada de sus padres y marido -el padre de ella es ginecólogo jubilado y en su día trajo al mundo a todos sus hijos, ella incluida-, que estuvo a su lado hasta que llegó el médico que la ha estado llevando. La última mallorquina del año fue Lorena Calvo Batista, que nació el día de Nochevieja a las 20'30 horas y pesó 3 kilos 400 gramos. Fue el último nacido en 2003. Su padre se llama Francisco Calvo y trabaja en una imprenta. Su madre es Denia, dominicana (del norte de la isla), simpática y guapa. En su país trabajó como auxiliar de farmacia. Cuenta Denia que llegaron a Son Llàtzer el 31 sobre el mediodía. Iba a una revisión, pero de pronto llegaron las primeras contracciones y quedó ingresada. «En realidad -dice- estaba fuera de cuentas; según el médico, debía dar a luz sobre el 22 de diciembre». El primer bebé de la Fundación Hospital de Manacor es José Antonio Estévez Ferrer, que pesó 3'800 kilogramos y nació a las 9.26 horas de la mañana de ayer, día de Año Nuevo. El último niño de 2003 en nacer en el hospital de Manacor es Albert Moreno Picornell, de 4'800 kilogramos. El bebé nació a las 17.48 horas del día 31 de diciembre y se trata del primer retoño de Alfonso Moreno y de María Damiana Picornell.