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El año 2003 ha sido muy intenso desde el punto de vista político en Balears. Las elecciones de mayo supusieron un cambio sustancial en las instituciones autonómicas y han marcado el inicio de cambios en los partidos de izquierdas.

Las elecciones autonómicas volvieron a situar al PP en el poder tras un paréntesis de cuatro años con un gobierno del Pacte de Progrés. El tiempo ha demostrado que la izquierda no supo calibrar los apoyos sociales que tenía su política. El factor económico tambien jugó en contra del Pacte. Además, los enfrentamientos internos en el gobierno del socialista Antich crearon una imagen muy negativa para el pacto suscrito en 1999. Así, una mayoría silenciosa, temerosa de que el enfrentamiento del Govern con el sector turístico pudiera tener consecuencias negativas para los ciudadanos de Balears, decidió respaldar la opción que defendió con acierto durante la campaña electoral Jaume Matas, el actual presidente balear. Por supuesto, eran unos resultados que no se reflejaban en las encuestas, muy poco fiables a tenor de las últimas experiencias.

De esta manera, Matas consiguió la mayoría absoluta en el Parlament, sobre todos los votos de las Pitiüses, y cerró un pacto necesario con UM -en el Consell- para impulsar un plan de infraestructuras que no llegó a definirse durante los cuatro años del Pacte.

Los resultados electorales, además, han supuesto cambios de gran trascendencia en las formaciones políticas, especialmente en el PSOE. Visto el panorama interno en el PSOE balear, siempre dado a las disputas, Antich ha preferido aceptar la propuesta de Zapatero y abandonar la política balear. Un mal síntoma para el PSOE. El PSM, mientras tanto, todavía debate su futuro interno, que no resolverá hasta este mismo año.

Otros partidos, en cambio, han cerrado con acierto las heridas que pudieron suponer los pactos postelectorales. Así, Maria Antònia Munar fue reelegida en diciembre presidenta de UM en un congreso en el que los críticos, contrarios a los pactos con el PP, apenas tuvieron peso. En definitiva, 2003 ha sido un año en el que todos los partidos deberían sacar conclusiones.