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A finales de este mismo mes, concluirán las obras de ampliación del muelle de la dársena de Sant Magí, que prevén la mejora de la pista ciclista y de la zona destinada a los viandantes en el Paseo Marítimo. Las obras, que se ejecutan en un tramo de 120 metros desde el inicio de la dársena hasta la verja del Club de Mar, consisten en la ampliación del paseo que, junto con el carril bici, sólo tenía una anchura de 4,8 metros. Con la reforma, la zona se amplía hasta los 12,5 metros.

Las obras ya se encuentran en la recta final, y estos días se procede al adoquinado del paseo, que es el mismo que en otro tramo del Paseo Marítim. De hecho, el objetivo de la Autoritat Portuària es dar uniformidad al pavimento del paseo. Después de estas obras, sólo quedará otro tramo -desde el final de la dársena de Sant Magí hasta la estación de golondrinas- por renovar. El proyecto también incluye la construcción de una rampa para minusválidos a la altura del torrente de Sant Magí. Una vez renovada la pavimentación y acabada la rampa, se instalará el mobiliario urbano. El alumbrado, además, se renueva y ya se han instalados numerosas farolas nuevas.

Los trabajos se han realizado por fases desde junio. En un primer momento, se procedió a la retirada de las losas existentes, al dragado de la zona y a la colocación de un nuevo tren de fondeadero para las embarcaciones que amarran. Después, se construyeron las canalizaciones para que las embarcaciones cuenten con servicios de agua y electricidad. En la actualidad se ejecuta la rampa y la pavimentación.