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J.T.B./N.D.
Los partidos de la oposición recordaron ayer a la consellera Mabel Cabrer que el ministro de Fomento, Francisco Àlvarez Cascos, es ahora un «ministro en funciones» y que ella no debería firmar el Convenio de Carreteras. Tal como informaba ayer Ultima Hora, el ministro Àlvarez Cascos remitió el convenio, ya firmado, a la consellera para que ésta estampara su firma. El convenio se aprobó en el último Consejo de Ministros celebrado antes de las elecciones. En principio estaba previsto que la propia Cabrer acudiera a Madrid para dar más realce al acuerdo, que iba a materializar un logro fruto de la buena relación entre los gobiernos de Balears y Madrid. Las cosas han cambiado.

Quetglas recordó que la firma de un convenio es una declaración de intenciones y que lo que cuenta son una serie de actos posteriores que deben tomar personas que en las próximas semanas quizá ya no estén en sus puestos y que «no se puede hipotecar al futuro Gobierno». Quetglas, en vista de que Munar declaró que las autopistas no eran su modelo, dijo ayer que ofrecía sus votos para cambiar el Plan de Carreteras y sustituir la autopista a Inca por el desdoblamiento Palma-Manacor.

El primero en aludir a este asunto fue Miquel Rosselló (EU), quien en representación de los partidos que forman la coalición Progressistes pidió a Cabrer que «esperara» ya que ayer mismo comenzó el traspaso de poderes. Francesc Quetglas, del PSOE, también pidió a la consellera que reconsiderara la firma. Para Quetglas, remitir un texto del calibre de un convenio de carreteras para ser firmado a vuelta de correo es «una triquiñuela inútil» y recordó que los primero que hizo el Govern de Matas al llegar al poder fue «suspender con mucha publicidad» los últimos actos del Ejecutivo del Pacte.