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Ayer, 31 de julio, último día de trabajo y primero de vacaciones para muchos ciudadanos, tuvo sus consecuencias más visibles en el aeropuerto de Sont Sant Joan. Se pudo observar una gran cantidad de gente de todas partes del mundo que bien esperaba irse de la Isla a sus destinos correspondientes o bien llegaba a ella para pasar unas vacaciones. Por otro lado, fuentes de AENA nos comunicaron que comparando este día con el mismo del año pasado se comprobó un aumento tanto en los pasajeros, de un 0,33 por ciento más que el año anterior, como en el de aeronaves, con un 0,28 por ciento más. Además, el número de vuelos que llegaron ayer a este aeropuerto fue exactamente de 962, y el número de pasajeros, de un total de 146.500.

Sólo a las doce del mediodía llegaron en menos de diez minutos nueve aviones. Por otro lado, el número de retrasos que hubo ayer durante todo el día fue bastante notorio. Por lo general, hubo retrasos entre una y seis horas en seis vuelos de Sont Sant Joan, lo que provocó numerosas esperas y alguna que otra queja entre los pasajeros.

Por ejemplo, la modelo Laura Sánchez, que llegó ayer a la Isla para presentar un barco para la Copa del Rey, dijo que estaba muy cansada. Llegaba de Barcelona y había tenido un retraso de cinco horas. «Estoy agotada, las esperas me cansan mucho. Vengo a Palma 5 horas y me ha costado llegar 5 horas de espera desde Barcelona, y dentro de nada vuelvo. Hoy me pasaré el día en el aeropuerto», declaró.