La temporada turística en Mallorca cada vez se estacionaliza más, de ahí los «tapones» de finales de julio y agosto.

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Mallorca afronta la primera quincena de agosto con el tradicional «tapón turístico», aunque la sobrecontratación («overcontracting») realizada por touroperadores y hoteleros ha provocado que desde el día 4 hasta el 15, el desvío de turistas de un hotel a otro será la tónica general en la práctica totalidad de las zonas turísticas de Mallorca.

Los grupos turísticos Thomas Cook y TUI indican que la situación está controlada «por la profesionalidad de los hoteleros, que saben cómo actuar en este tipo de situaciones y solventar todos los problemas. La sobrecontratación realizada hará que clientes que hayan reservado plaza en un hotel determinado, no puedan alojarse en el mismo por estar totalmente lleno, de ahí que serán desviados y recolados en otros hoteles de la misma zona».

El presidente de la Federación Hotelera de Mallorca, Pere Cañellas, se limitó a señalar que «la planta hotelera de la Isla estará llena todo el mes».

Las zonas más afectadas por este «tapón turístico» serán las de Cala Millor, Peguera, Cala Ratjada, Alcúdia y Pollença, aunque en ninguna de ellas se espera que se produzcan problemas, puesto que las distintas asociaciones están controlando esta situación para que no haya denuncias ni de touroperadores ni de turistas afectados ante la Conselleria de Turisme. En el resto de zonas la situación será muy similar, pero en menor medida al haberse cerrado las ventas de reservas con antelación para evitar «overbooking».

Los touroperadores califican esta situación de «overbooking controlado». En su opinión se trata de una situación lógica cuando confluyen todos los mercados emisores: «Desde mediados de julio siempre se produce la misma situación porque es la temporada alta de todos los mercados emisores. En el caso de Mallorca, los mercados ruso, español e italiano logran disponer de camas al haberlas contratado en garantía los mayoristas, de ahí que se produzcan tapones turísticos por esta masiva afluencia de visitantes».

Control
La Conselleria de Turisme tiene activado desde principios de julio la Oficina de Seguimiento de la Ocupación y mantiene todo el equipo de inspectores con un único objetivo: controlar la oferta de alojamiento ilegal. Desde Turisme indican que confían en que hoteleros y touroperadores puedan resolver el «tapón turístico», porque en caso contrario tendrán que actuar para evitar que se produzcan denuncias por «overbooking». En cualquier caso, tanto Turisme como hoteleros y touroperadores afirman que no se vivirá la situación «salvaje» del pasado año, en el que el desvío de turistas de un hotel a otro afectaba a grupos de 40, 50 y 60 personas. «En esta ocasión, los desvíos serán menores, pero se van a dar», indican desde Thomas Cook y TUI.

Los niveles de rentabilidad en agosto serán superiores a los del pasado año, principalmente porque se ha vendido todo a precio de folleto, salvo algunas excepciones, como hoteles en segunda o tercera línea de playa. La patronal hotelera manifiesta su satisfacción por esta hecho, aunque esperan que en la segunda quincena y primeros veinte días de septiembre continúe la misma situación, para así paliar los efectos negativos de los descensos de ocupación en mayo, junio y primera quincena de julio. La Federación afirma que se está estacionalizando cada vez más la temporada en Mallorca.