Juan Mestre02/12/07 0:00
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El Govern destinará 12 millones de euros para crear 2.000 plazas para dar cobertura educativa a niños que tengan entre 0 y 3 años, un plan que tendrá el apoyo económico del Ministerio de Educación y Ciencia. El president del Govern, Francesc Antich, y la ministra de Educación, Mercedes Cabrera, firmaron ayer en el Consolat de Mar el convenio para desarrollar el «Plan de Primera Infància», pionera en el Estado español y que supondrá una inversión media por alumno de 6.000 euros por parte de la Comunitat. El Gobierno central deberá aportar otros 6.000 euros, aproximadamente. «Se trata de un ambicioso plan que coincide con la política educativa del Ministerio de Educación», dijo Antich durante la presentación del nuevo plan.

La ministra Mercedes Cabrera mostró su apoyo por una «apuesta absoluta y radical» del Gobierno central en favor de la educación. «El Govern ha demostrado su talento al sacar adelante una iniciativa de estas características», elogió Cabrera en una acto que también contó con la asistencia de la consellera d'Educació, Bárbara Galmés, que hizo una pormenorizada explicación de los detalles de su propuesta.

El Govern invertirá durante esta legislatura 17'5 millones de euros para poner en marcha este programa, de los cuales 12 millones servirán para crear nuevas plazas y la parte restante -5'7 millones- para consolidar las 1.900 plazas de 0 a 3 años que ya existen en la actualidad.

El Ministerio de Educación aportará la parte restante hasta llegar a los 30 millones, que es el presupuesto total del plan. Galmés reconoció que en la actualidad ya existen 1.900 plazas en centros de Balears que dan cobertura educativa a niños de 0 a 3 años, pero aclaró que el Ejecutivo balear debe «legalizar» esta oferta educativa. En estos casos, el Govern financiará el 30 por ciento del coste de las plazas que se consideran «precarias».

De manera complementaria a la creación de las nuevas 2.000 plazas, la Conselleria d'Educació pretende poner en marcha «mecanismos» para facilitar la incorporación y adaptación de los 170 maestros en especialidad infantil y técnicos de grado superior que serán necesarios para desarrollar este proyecto.

El Ejecutivo debe aprobar el decreto que fije los requisitos mínimos que deben cumplir los centros que imparten el primer ciclo de educación infantil.