Imagen de la protesta que varias decenas de estudiantes llevó a cabo en la conselleria de Educación en mayo. | Jaume Morey

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El titular del Juzgado de Instrucción número 6 de Palma, Miquel Florit, ha citado a declarar para los próximos días 25, 26, 30 y 31 a 29 de los aproximadamente sesenta estudiantes que el pasado 22 de mayo ocuparon la Conselleria de Educación, Cultura y Universidades para protestar contra los recortes del Govern en materia educativa.

En concreto, según la providencia dictada por el magistrado, a la que ha tenido acceso Europa Press, todos ellos han sido emplazados a comparecer en calidad de denunciados como consecuencia de los hechos ocurridos en el departamento dirigido por Rafael Bosch, de forma que ocho de ellos serán interrogados el día 25 a partir de las 9.30 horas, otros ocho el 26, el mismo número el 30 y cinco el 31.

Los alumnos, pertenecientes a la Asamblea de la Universitat de les Illes Balears (UIB), accedieron a la Conselleria como forma de protesta, donde colgaron una pancarta en la que se podía leer 'Educación recortada, Conselleria ocupada'. Una vez dentro, una veintena de ellos logró entrar en el despacho del conseller quien, no obstante, no se encontraba en el interior en ese momento por lo que optaron por salir y realizar una sentada en la puerta.

Protesta por los recortes

Los sesenta estudiantes permanecieron dentro del departamento hasta que fueron desalojados por la Policía Nacional, lo que se produjo después de que uno de los alumnos leyese un manifiesto en el que criticaba que el PP, «aprovechando el contexto de crisis capitalista, acelera con sus medidas de los últimos meses la transformación del modelo educativo hacia lo que representa desmantelar la enseñanza pública».

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«En respuesta a estos ataques, que padece directamente la comunidad educativa y en solidaridad con el resto de luchas en defensa de la lengua, la sanidad pública y el territorio, la asamblea de la UIB ha decidido ocupar la Conselleria y no nos iremos de aquí hasta que el Govern recule en todos y cada uno de los ataques que ha lanzado contra la educación», remarcó.

Entre los recortes, citó la reducción del 20 por ciento en el presupuesto de educación, el aumento de las tasas universitarias, la introducción de la limitación de plazas en todas las carreras; el aumento de la ratio de alumnos en escuelas e institutos; el ataque contra la lengua catalana y sus hablantes; la reducción de becas y el aumento escandaloso de las tarifas de transporte público.

Tanto es así que exigió al Ejecutivo balear que «rectifique» y pidió al equipo rectoral de la UIB que se declare «insumiso ante la escandalosa subida de las tasas el próximo curso», al tiempo que reclamó que «se congelen los precios de las matrículas universitarias y se bajen para las familias que están padeciendo una situación económica difícil».

Denuncia a la jefa de gabinete

Se da la circunstancia de que otro de los estudiantes llegó a interponer una denuncia contra Ana María Rodríguez, jefa de gabinete de Boch, a raíz del golpe en la cabeza que presuntamente le propinó durante el acto de protesta. En su denuncia, el afectado aseveraba que las tres personas que en ese momento se encontraban en la Conselleria, entre ellas la denunciada, querían encerrarle a él y a sus compañeros en una habitación, tras lo cual «hubo una serie de empujones para intentar salir y esas tres personas no lo permitían».

Tal y como relataba en el escrito, un compañero de la jefa de gabinete, en ese forcejeo, tiró al suelo a Rodríguez de forma accidental, y cuando ésta se levantó del suelo se dirigió hacia el estudiante y le pegó un golpe en la cabeza, «tipo colleja contundente».