La silla estaba depositada en la finca de Son Roca, ubicada en Son Ferriol, propiedad de los Weyler. Depués pasó por diversos avatares, desde quedar en el olvido en la propia finca hasta permanecer en depósito en el Consolat de Mar en los últimos años del franquismo, cuando en el Consolat había un pequeño museo marítimo. Después fue trasladada al Museu de Mallorca, donde no fue expuesta.
Finalmente, en los noventa, el teniente coronel Durán consiguió que fuese trasladada al recién creado Museo Histórico Militar de Sant Carles, en cuyo consorcio, además de Defensa, están representadas las principales instituciones insulares. Finalmente, Cort ha pedido la silla a Defensa alegando que es el dueño y la ha conseguido.
¿Deseo del padre?
No se sabe si la donación de la silla de Maceo a Palma fue decisión de Valeriano o de su hijo Fernando. Ambos murieron con apenas un año de diferencia. Fernando, nacido en 1877, era abogado y militar. Llegó a comandante de Caballería y fue ayudante de campo de su padre, al que acompañó a Cuba y Filipinas.
Más tarde fue dos veces diputado por Mallorca por el Partido Liberal y tuvo otros cargos políticos durante la Restauración. Tras la caída de Primo de Rivera volvió a colaborar con el almirante Aznar en los meses previos al advenimiento de la II República. Al haber sido un ayudante de su padre, vivió la historia de la silla, desde la muerte de Maceo por balazos españoles en Punta Brava en 1896 hasta el traslado de la reliquia a Palma.
Ahora, Cort ve «complejo» un acuerdo de los Ministerios de Cultura de Cuba y España para una cesión temporal de la silla a La Habana. Fuentes de Defensa afirman que otra posibilidad sería un intercambio de botín de guerra, pero a Cort no parece interesarle ningún botín en manos cubanas. Cort ha cedido obras temporalmente, como el cuadro del entierro de Ramon Llull, enviado a California. Pero en este caso hay dudas sobre las garantías que pueda dar Cuba sobre el mantenimiento de la silla.
La próxima semana, Cort comenzará las tareas de adecuación de una de las salas de Bellver donde será colocada la silla y el correspondiente panel explicativo de cara a la apertura al público el próximo septiembre.
9 comentarios
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Seguro que los familiares ahora retirarían la donación, al igual que Monseñor Alcover no dejaría que su casa estuviese en las manos de gente como la que hay. Esta silla el gran general mallorquín se la trajo tras su mando como Capitan General de Filipinas. Estuvo en un almacén muchos años, hasta que un buen militar la pidió para ponerla en un buen museo militar- Castillo de San Carlos- y desde entonces allí estaba. El comunista-populista amigo de Valtonyc, quiere hacer publicidad con eso de dejarla a los cubanos, como bien saben, muy demócratas. Total, más necedades de Cort y populismo, ese que solo se para ante los juzgados.
Cort y su populismo, no han hecho nada más que mover una silla que estaba muy bien exhibida, en un museo bonito y ahora a fardar de que se la dan a los compinches comunistas bolivarianos, castristas. Sois puro populismo, ese que revienta las cosas.
A eso dedican el tiempo los funcionarios de Cort a buscar testamentos antiguos, menos mal que lo harán en su tiempo libre....
La silla debe volver a Cuba de donde nuca debió salir
@la polilla: ¿A qué campos de concentración se refiere? ¿A los que utilizaba “el Che” en connivencia con Fidel para masacrar homosexuales y donde, a su entrada, se podía leer “El trabajo os hará hombres?”
interesante que en Mallorca y Palma haya calles y plazas con el nombre de Weyler, asesino en masa de la población cubana que luchó por su independencia. el creador y materializador de la idea de los campos de concentración es un héroe en sa illa. por favor!!
La voluntad de los herederos de Weyler es que la silla permanezca en Palma y bajo ningún concepto se ceda a Cuba mientras exista una dictadura, ya que representa todos los valores contrarios a lo que la silla simboliza. No cedan a los intereses de determinados empresarios hoteleros mallorquines en Cuba que buscan la simpatía del régimen.
Que pidan ahora los documentos de la Corona de Mallorca , que Cataluña nos ha robado y que no quiere entregar .
Vaja uns maldecaps que te en Noguera...