Noemí estuvo de baja durante cerca de medio año, hasta el pasado 29 de enero. La Seguridad Social le dio el alta. «Lo recibimos tarde», señala su marido, Jordi Delgado. Más tarde, los propios servicios médicos de la empresa la declararon apta. «La pusieron a trabajar. La médico le dijo que estaba para trabajar». Así, a principios de este mes, Noemí se incorporó. «A mí lo que me preocupa es el dolor que sufre, no puede caminar, no puede hacer el trabajo de un controlador que supone trabajar varios kilómetros al día si ni siquiera puede andar quinientos metros», añade Delgado.
Tras apurar los días que tenía de vacaciones acumuladas, el primer día de trabajo fue el pasado día cinco de marzo. A mitad de su jornada, en el barrio de Pere Garau, la mujer no pudo más y se cayó. Tuvo que ser socorrida por una ambulancia. Desde ese día se han sucedido episodios similares y visitas a urgencias. Así hasta el lunes pasado, cuando con una serie de informes nuevos, los servicios médicos de la empresa le han declarado como no apta para trabajar, lo que implica que se queda en casa sin ningún tipo de prestación.
Antes, un médico de urgencias le prescribió que utilizara una silla de ruedas para trabajar, algo inviable para poder llevar a cabo sus funciones. Tuvo el alivio de los días de lluvia, «fuimos con silla de ruedas y nos quedamos en un bar mientras caía», comenta su marido.
Delgado considera que esta situación demuestra que «el sistema falla por algún lado», o bien por la Seguridad Social o bien por la empresa que tampoco le ha buscado otra colocación que no suponga que camine.
En casa tras los últimos partes médicos, Noemí ahora está a la espera de varias decisiones por parte de la Seguridad Social, la más probable es una baja temporal similar a la que antes tenía por una recaída. Además, ha impugnado la decisión de darle el alta y ha iniciado un procedimiento para pedir algún tipo de incapacidad, aunque ese sí es un procedimiento más largo que se demorará durante meses.
31 comentarios
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Esto es el gran pacte de progrés !!! así es el socialismo , de estar jodido a que te jodan más !!!
Hay gente que no puede ni moverse y le dan el alta y otros con un resfriado los jubilan este es nuestro país primer mundista? Una pena Venezuela más cerca.
Habria pasado lo mismo de no tratarse de una española? Ahí lo dejo.
Señores, el servicio de la ORA está municipalizado, es decir, lo gestiona el Ajuntament de Palma a través del SMAP, así que ¿qué esperan? Son unos ineptos, y en el SMAP (que depende del regidor de Movilidad Dalmau) no son una excepción. Son bastante inútiles. Eso si, a derrochar dinero no les gana nadie...
hay un poco de cuento en esa cadera
@Es evident que alguns s'han quedat en el titular Blas es el metge de la Seguretat Social que ha donat el alta, i barbaritats com aquesta, si te aquesta impossibilitat de treballar que pareix que si, no s'han de consentir, i jo n'he vist mes d'una així.
@En paparra, no va esser el seu metge, va esser el metge, o la inspecció mèdica de la Seguretat Social, i el altre que va dir a treballar va esser el de l'empresa que te la concessió de la Ora. Barbaritats com aquestes n'he vist més d'una
¿SINDICATOS?
Una persona si ya de por sí tiene problemas óseos, enfermedad que la incapacita para estar horas y horas de pie, ha otros tipos de trabajos que pueda estar sentada, adaptado. Y no tener que cambiar horas de horas cuando no puede.
Ver estás imágenes me pone de muy mala leche. Cómo puede ser qué la Seguridad Social no pase a esta mujer por un tribunal médico para incapacitarla. Luego los servicios médicos de la ORA qué digan que está mujer es apta para trabajar es para matarlos. Y la dirección o gerencia de la ORA deciros que sois unos inmorales de no darle otro puesto de trabajo a esta mujer que no sea de controlador en la calle. No digo más cosas qué me gustaría expresar porque no me lo publicarán, pero ya podemos ver de manos de quienes estamos.