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El presidente de la Generalitat de Catalunya, Jordi Pujol, consideró ayer inadmisible que se pongan dificultades a la recuperación y normalización del catalán y que negar que hubo persecución al catalán es «inadmisible, injusto, regresivo y falto a la verdad». En una conferencia de prensa ofrecida en Madrid poco antes de inaugurar con los Reyes la exposición «Catalunya. Tierra de acogida», Pujol rechazó también «que se culpabilice a las víctimas» de esa persecución y sean presentadas «como agresores» o se les acuse de querer imponer el catalán en asuntos como el DNI bilingüe.

Pujol, que explicó estos tres puntos «al margen de polémicas» y sin querer referirse a nadie en concreto "según dijo", se mostró esperanzado en que la exposición que se inauguró sirva para aumentar la comprensión y el entendimiento de Catalunya por parte del resto de España. Lamentó que, a pesar de «esfuerzos pedagógicos» como éste todavía haya «situaciones muy sorprendentes por algunas declaraciones».

Al ser preguntado por los periodistas en relación con las manifestaciones en las que la ministra de Educación, Cultura y Deporte, Pilar del Castillo "con la que coincidió poco después en la apertura de la exposición" cuestionó que el catalán hubiera sido prohibido históricamente, Pujol señaló que quiere creer que «ha habido una ignorancia de los hechos» y que no lo puede entender de otra manera.

Aseguró que el catalán ha sido perseguido durante siglos y especialmente durante la dictadura con el «ánimo de extirparlo», por lo que, en una situación más justa, tiene que recuperarse y estar protegida por las leyes, para que la sociedad haga un esfuerzo de reconstruir lo destruido por «actos autoritarios contrarios a Catalunya». Dijo que los efectos de la «persecución» del catalán «duran hasta hoy» por «inercia» de la situación anterior y que negarla es inadmisible por «injusto, regresivo y falta absoluta a la verdad», pues es «como un puñetazo en el ojo duro y reciente». Respecto al DNI bilingüe, recordó que debe ser a petición del interesado, por lo que se corre el riesgo de «hacérselo difícil».