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El Índice de Precios de Consumo (IPC) aumentó un 0'5% en abril, con lo que la tasa acumulada en 2001 subió al 1'3% y la interanual al 4%, el doble de la previsión oficial para todo el año, informó el Instituto Nacional de Estadística (INE). La inflación subyacente "excluye la variación de los precios energéticos y de los alimentos frescos" creció un 0'4% y alcanzó el 3'4% en tasa interanual. Según el INE, los responsables del aumento del IPC de abril fueron los alimentos frescos, servicios turísticos, gasolinas, gas butano, ropa y gastos de vivienda, mientras que sólo destaca el abaratamiento de la carne de ave (2'8%) y ovino (3'2%).

Por grupos, ocio y cultura se encareció un 1'7%, transporte (0'8% por ciento), vestido y calzado y vivienda (0'6 por ciento) y hoteles, cafés y restaurantes (0'4 por ciento), alimentos y bebidas no alcohólicas, menaje y otros (0'3), medicina (0'2) y enseñanza (0'1) y «bebidas alcohólicas y tabaco» y «comunicaciones» no variaron sus precios. El secretario de Estado de Economía, José Folgado, dijo que el IPC de abril «no es positivo» y, por lo tanto, «el Gobierno no puede estar satisfecho con él» aunque, añadió, se sitúa en un contexto de «intensos impulsos inflacionistas» en Europa que dará lugar a una aceleración de la inflación europea mayor que la española y, por lo tanto, a una reducción del diferencial y una mejora de la competitividad.

Destacó la necesidad de alcanzar el equilibrio presupuestario e incidir en las reformas estructurales para frenar la inflación y precisó que «un comportamiento razonable de los agentes económicos y sociales en la negociación colectiva y la moderación de la demanda interna» contribuiría a «reconducir la inflación hacia niveles más razonables». Por el contrario CC OO, UGT, PSOE e IU consideraron imposible alcanzar el objetivo oficial de inflación para el conjunto de año (2 por ciento) y alertaron de la pérdida de poder adquisitivo que esto supondrá para los trabajadores, mientras que la CEOE confió en un descenso de la inflación en el segundo semestre del año.

El secretario general de UGT, Cándido Méndez, estimó que la subida media salarial debe ser el cuatro por ciento para «evitar que los trabajadores paguen el fracaso rotundo de la política del Gobierno». CC OO instó al Ministerio de Economía a desarrollar políticas más efectivas en la introducción de competencia en mercados como la energía, las comunicaciones, el turismo y los servicios financieros, y consideró que la tasa subyacente demuestra el importante componente estructural del IPC de abril.