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EUROPA PRESS-VITORIA El presidente del Gobierno, José María Aznar, advirtió ayer a los ciudadanos vascos que el cambio «nunca se producirá» si siguen los mismos que pactaron con ETA y a los que «la banda terrorista ha derrotado ya». Explicó, durante el mitin de cierre de campaña, que el PP tiene una «obligación que cumplir con la libertad», por los que murieron por ella y pidió el voto «para extirpar el odio de Euskadi», a los demócratas, los indecisos y a los nacionalistas, que antes que nacionalistas son demócratas.

Aznar realizó su discurso ante unos mil invitados al cierre de la campaña electoral en el polideportivo de Sansomendi en Vitoria, donde se encontraban, entre otras personas, la dirección del PP con Javier Arenas a la cabeza; los dos vicepresidente del Gobierno, Mariano Rajoy y Rodrigo Rato y los ministros de Justicia, Angel Acebes y Sanidad, Celia Villalobos. También acudieron el secretario de Estado de Seguridad, Pedro Morenés y el director general de la Policía, Juan Cotino, entre otros para arropar a Mayor Oreja.

El jefe del Ejecutivo dedicó buena parte de su discurso a explicar lo que él llama la «gran mentira» de los nacionalistas a los que acusó de «inventarse cuentos» y de intentar cambiar la «historia» cuando dicen que «aquí no ha pasado nada» en un intento «patético» de que alguien les crea. Así, recordó que el lehendakari Juan José Ibarretxe había sido elegido con los votos de «terroristas convictos» y que los nacionalistas habían pactado los presupuestos con el brazo político de una organización terrorista. «El destino del dinero de los vascos fue decidido con los cómplices del terror», sentenció.

Oreja realizó un emotivo recuerdo a las víctimas del terrorismo y, en especial al que fue concejal en Ermua Miguel Angel Blanco, cuyos padres han asistido a varios mítines de la campaña, y a Oscar Giménez, hijo de la última víctima de la banda terrorista, el presidente del PP aragonés, Manuel Giménez. Oreja, pidió el voto a dos grandes grupos de ciudadanos: en primer lugar a todos los vascos que optaron por el PP en las elecciones generales del pasado año, y «especialmente» a los indecisos.